Salamanca, 4 mar (.).- La Caja Rural de Salamanca ha obtenido un beneficio neto de 3,9 millones en 2020, un 20,9 por ciento menos respecto a 2019, tras efectuar una provisión extraordinaria de 1,5 millones de euros con el objeto de cubrir el posible impacto económico de la pandemia de coronavirus.
Además, el volumen de negocio de la entidad se ha elevado un 7,02 por ciento en 2020, hasta los 1.881 millones de euros, continuando con el crecimiento experimentado los últimos años, según ha informado este jueves la entidad en una nota de prensa.
Con estos datos, el activo total ha ascendido a 1.166 millones de euros, importe que refleja un incremento del 11,15 por ciento sobre la cifra de balance del ejercicio anterior.
Respecto a los depósitos de la clientela se ha superado por primera vez en la historia de Caja Rural de Salamanca los 1.000 millones de euros, que suponen un aumento del 12,25 por ciento, y el crédito a la clientela ha alcanzado los 557 millones de euros, un 1,41 por ciento más respecto al ejercicio anterior.
En el marco de las líneas ICO, la entidad salmantina ha concedido 557 operaciones de financiación, por un total por encima de los 43 millones de euros.
Además, Caja Rural de Salamanca ha reducido los gastos de explotación, que se ha traducido en incremento del margen de explotación del 4,13 por ciento, hasta casi 6 millones de euros.
En cuanto a la ratio de solvencia, ha sido del 25,50 por ciento, superior en 2,16 puntos porcentuales a la del ejercicio anterior y por encima de las exigencias regulatorias, una mejora que está en consonancia con otras cifras como las ratios de apalancamiento -del 8,49 por ciento- y de liquidez -del 849,45 por ciento-.
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