María Ruíz
Bruselas, 20 dic (EFE).- La Comisión Europea (CE) anunció hoy que antes de tomar una decisión definitiva sobre el acuerdo de venta a Telefónica de la filial alemana de móviles de KPN, E-Plus, examinará la operación a fondo para determinar si restringe la competencia en el sector y por tanto infringe las normas europeas.
Su decisión de estudiar la transacción de forma pormenorizada no prejuzga el resultado de la investigación, que la CE tendrá que concluir en un plazo máximo de 90 días hábiles con la autorización o veto de la compra.
"Esta decisión está en línea con nuestras expectativas. Seguimos confiando en el proceso y en obtener la aprobación legislativa a mediados del año que viene", dijeron hoy a Efe fuentes de KPN.
La apertura de la investigación por parte de Bruselas implica también una negativa a la petición de las autoridades alemanas de competencia de hacerse cargo del caso.
KPN no quiso comentar esta cuestión y se limitó a reiterar que lo ocurrido se sitúa en línea de lo que esperaba la compañía.
Bruselas cree que la operación puede tener consecuencias negativas en el sector de la telefonía móvil de Alemania al existir el riesgo de que reduzca la competencia en el mercado minorista, así como el acceso al mayorista, explicó la CE en un comunicado.
El Ejecutivo comunitario dispone ahora de 90 días hábiles para estudiar de forma pormenorizada el caso y decidir si autoriza o veta la transacción.
La Comisión teme el impacto que pueda tener la operación en el mercado alemán porque uniría a dos compañías, Telefónica y E-Plus, que ahora son competidoras y crearía un nuevo operador de tamaño similar a los dos más grandes, Deutsche Telekom y Vodafone.
El resultado de la transacción en los términos que está planteada en la actualidad eliminaría una fuerza competitiva importante y ejercería una presión competitiva significativa sobre los competidores restantes, señala Bruselas.
La CE también considera que tras la operación los restantes operadores de redes móviles podrían tener menos incentivos para conceder el acceso a su red a los operadores de redes virtuales móviles (MVNO) y proveedores de servicios.
En este contexto, MVNO potenciales y existentes y los proveedores de servicios tendrían menos posibilidades de elección de las redes de acogida y menos poder de negociación, por tanto, su posición sería más débil de cara a obtener condiciones favorables de acceso mayorista.
En último lugar, apunta a que no se puede excluir que la reducción en el número de competidores tras la fusión aumente la probabilidad de que los operadores de redes móviles coordinen su comportamiento competitivo y aumenten los precios.
Telefónica anunció en julio su oferta de compra de E-Plus a la holandesa KPN para crear la primera operadora móvil de Alemania por 8.100 millones de euros.
En agosto, América Móvil, empresa del magnate mexicano Carlos Slim y accionista de referencia de KPN, se comprometió a apoyar la venta de E-Plus en la junta de accionistas que la operadora holandesa mantendría en octubre a cambio de una mejora en los términos de la compra.
Telefónica aceptó entonces elevar ligeramente el precio de compra de 8.100 a 8.550 millones de euros.
De ese total, 5.000 millones serían en efectivo (4.140 millones por parte de Telefónica y 860 millones por los accionistas minoritarios de Telefónica Deutschland) y el resto (3.550 millones) corresponde a la valoración del 20,5 % de la operadora resultante que KPN mantendrá en su poder.
Telefónica se ha asegurado además una opción de compra del 2,9 % del capital de Telefónica Deutschland.
Al final, y sin contar la opción, Telefónica tendrá el 62,1 % de la nueva Telefónica Deutschland.
Los accionistas de KPN autorizaron la operación a principios de octubre. EFE
mrn/emm/jj