Bruselas, 3 jul (EFE).- La Comisión Europea (CE) propuso hoy normas revisadas sobre las ayudas de estado para los más de 460 aeropuertos y 150 aerolíneas que operan en la Unión Europea (UE) a fin de evitar abusos.
"Debemos evitar las ayudas perjudiciales que introducen distorsiones en la competencia", señaló el comisario europeo de Competencia, el español Joaquín Almunia, en conferencia de prensa en Bruselas.
Estas nuevas directrices pasarán a ser oficiales a principios del próximo año, una vez que hayan sido consultadas con los interesados del sector
Almunia explicó que el objetivo que persigue Bruselas es asegurar que el dinero de los contribuyentes se invierte bien y va a donde realmente se necesita.
Según el comisario, las nuevas directrices sobre ayudas de estado serán "clave" para el éxito y la competitividad de la industria europea de la aviación, y servirán para mantener una competencia justa independientemente del modelo de negocio.
La CE recordó que las ayudas estatales a la inversión en infraestructura aeroportuaria están permitidas siempre que exista una verdadera necesidad de transporte y el apoyo público necesario para garantizar el acceso.
Sin embargo, hasta ahora no se había abordado la cuestión de la intensidad que pueden alcanzar esas ayudas, un aspecto que la CE quiere tratar con la presente revisión de las normas.
En concreto, propone adaptar la magnitud de la ayuda al tamaño del aeropuerto, de manera que los aeródromos más pequeños, como los regionales, puedan recibir más apoyo que los grandes a fin de garantizar el equilibrio adecuado entre inversión privada y pública.
En cuanto a las ayudas a la explotación de aeropuertos, que no permiten las reglas actuales, la CE propone que sí se permitan durante un periodo transitorio de 10 años bajo ciertas condiciones, con el fin de dar a los aeropuertos tiempo para ajustar su modelo de negocio.
Estas ayudas irían disminuyendo de manera gradual y variarán en función de la situación financiera de cada aeropuerto.
Almunia recalcó que los costes de explotación de los aeropuertos no deberían en principio estar subvencionados, sino que los operadores deberían poder recuperarlos a través de las tasas que cobran a sus clientes.
Reconoció, no obstante, que sobre todo para aeropuertos regionales es más realista ofrecer durante un tiempo ciertas "medidas de acompañamiento" para que los aeródromos tengan tiempo para adaptarse.
El Ejecutivo comunitario también sugiere simplificar y adaptar a la situación actual del mercado las normas sobre ayudas a aerolíneas para poner en marcha una nueva ruta, que están permitidas siempre que sean limitadas en el tiempo.
El comisario afirmó que de los 61 casos que estudia la CE para determinar si se dieron ayudas de estado injustificadas, entre un 35 % y un 40 % están relacionados con este tipo de subvenciones al establecimiento de rutas, en especial a compañías de bajo coste.
Bruselas analiza en estos casos si se respeta el principio de inversor en una economía de mercado o se trata de rutas artificialmente mantenidas a base de subvenciones, en cuyo caso las ayudas no serían legales y deberían devolverse.
Las nuevas directrices de la CE están basadas en una consulta pública previa llevada a cabo en 2011 y tienen por objetivo último impulsar el crecimiento económico y la promoción de otros objetivos de interés común europeo, y desalentar las ayuda dañinas que no traen verdadero valor añadido y perjudican a la competencia del sector.
La CE invitó a todos los interesados a que de aquí a septiembre remitan su opinión sobre las nuevas directrices a Bruselas con vistas a la adopción de directrices definitivas a principios de 2014.
El transporte aéreo contribuye de manera significativa a la economía europea y aporta más de 140.000 millones de euros al Producto Interior Bruto de la UE y emplea a 2,3 millones de personas, según datos de la CE. EFE
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