BERLÍN (Reuters) - La buena confianza de los consumidores alemanes decayó ligeramente más de lo esperado en marzo, mostró un sondeo el miércoles, sugiriendo que las preocupaciones políticas podrían haber lastrado al crecimiento impulsado por el consumo de la economía más potente de Europa.
Los gastos de la familia han superado a las exportaciones como la mayor fuente de expansión económica en Alemania en los últimos años, según las carteras de los consumidores se han visto engrosadas por unos niveles de empleo récord, una mayor estabilidad laboral, unas subidas salariales por encima de la inflación y una bajada de los costes de endeudamiento.
Sin embargo, el instituto con base en Nuremberg, GfK, dijo que el índice de la confianza del consumidor, que está basado en una encuesta a alrededor de 2.000 alemanes, cayó a los 10,8 puntos de camino a marzo respecto al 11,0 registrado en febrero, que había sido el nivel más alto desde 2001.
Los resultados de marzo se comparan con la media de las estimaciones de una encuesta de Reuters que preveía que el índice bajaría a 10,9.
El investigador de GfK Rolf Buerkl apuntó a la incertidumbre política provocada por las inconclusivas elecciones federales del año pasado como un factor causante de la caída en los tres componentes del índice.
"Las turbulencias políticas alrededor de la formación de un gobierno estable y viable en Berlín podrían haber inquietado a los consumidores", dijo Buerkl. "Pese a esta caída, el optimismo de consumo entre los ciudadanos alemanes continúa alto".
La encuesta de GfK se llevó a cabo desde el 26 de enero hasta el 9 de febrero, principalmente mientras estaban en curso las negociaciones entre los conservadores de la canciller Angela Merkel y los sociodemócratas del SPD, las cuales resultaron en un acuerdo el 7 de febrero.
El subíndice del GfK que mide las expectativas de los ingresos cayó un 3 por ciento en el mes hasta alcanzar mínimos de tres meses de 53,8 puntos, mientras que la voluntad de los consumidores de comprar decreció 4,1 puntos hasta 56,3, el nivel más bajo desde julio.
El subíndice que mide las expectativas generales de la economía retrocedió hasta los 45,6 puntos, respecto a los 54,4 del mes pasado, aunque sigue muy por encima de los niveles registrados el año pasado.
"Pese a las pérdidas de este mes, los consumidores continuan viendo las perspectivas económicas con optimismo", dijo Buerkl. "La economía de Alemania está actualmente rindiendo a una alta capacidad y los consumidores esperan que esto continue en los próximos meses".
La Confederación Alemana de las Cámaras de la Industria y Comercio (DIHK, por sus siglas en alemán) espera que la economía de Alemania crezca un 2,7 por ciento este año, lo cual sería su mejor ritmo desde 2011.