Viena, 19 jun (EFE).- La tercera mayor constructora de Austria, PORR, ha expresado su interés en adquirir parte del grupo Alpine, perteneciente a la española FCC, después de que el mismo haya solicitado en Viena el concurso voluntario de acreedores.
"PORR tiene interés en asumir de manera razonable parte de Alpine o una estructura total para Austria. Al respecto ya están en curso las conversaciones", señaló la empresa en un comunicado.
"Por supuesto, contamos con otros interesados, todos tienen interés en buen personal cualificado", concluye la escueta nota.
En declaraciones que publica el diario económico austríaco Wirtschaftsblatt, el director ejecutivo de PORR, Karl-Heinz Strauss, subraya la disponibilidad de su empresa a "asumir todo el negocio de Alpine en Austria o algunas de sus partes".
Añade que en caso de hacerlo, preservaría los cerca de 7.000 puestos de trabajo que Alpine tiene en la república alpina.
Porr es una de las empresas más antiguas de la Bolsa de Viena.
Su volumen de negocios se situó en 2012 en los 2.300 millones de euros. A finales de marzo, contaba con 9.338 empleados y encargos por valor de 3.484 millones de euros.
Alpine ha presentado hoy ante el Tribunal de Comercio de Viena la solicitud para abrir un procedimiento de insolvencia, lo que hace peligrar unos 7.000 puestos de trabajo.
Tras ello, FCC ha subrayado que esta situación "recomienda" provisionar la totalidad del valor de los activos de Alpine, las cuentas consolidadas de FCC, lo que producirá un resultado negativo después de impuestos de 289 millones en este ejercicio.
Alpine había advertido ayer de que estaba preparando un concurso de acreedores después de que hubiesen fracasado las negociaciones para recibir una nueva inyección de liquidez.
Sus acciones han quedado suspendidas por tiempo indefinido a partir de hoy, según informó la Bolsa de Viena en un comunicado, mientras que los títulos de FCC se anotaban la mayor caída del IBEX 35-el principal selectivo de la bolsa española- al descender un 5 % hasta los 7,4 euros.
Alpine y FCC negociaban desde hace meses con los principales acreedores una inyección de capitales y una quita de su deuda, a cambio de una profunda reestructuración. EFE