París, 13 abr (.).- La ayuda pública al desarrollo de los países ricos de la OCDE creció un 3,5 % en términos reales en 2020, gracias a dispositivos para hacer frente a la crisis de la covid-19, y alcanzó una cantidad récord de 161.172 millones de dólares (unos 135.408 millones de euros).
Ese incremento de la aportación se produjo pese a la histórica recesión que también sufrieron los 29 países que forman parte del Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
"La buena noticia es que la ayuda pública al desarrollo ha crecido", señaló en la presentación pública de estas cifras el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, que a continuación matizó ese optimismo.
"Sólo hemos movilizado -añadió Gurría- un 1 % de los 16 billones de euros" que los gobiernos del mundo han puesto encima de la mesa para sus planes de recuperación de la crisis, y eso en un momento en que esa ayuda "es crucial" por el hundimiento de los otros flujos financieros en dirección de los países pobres.
Para ilustrar la situación allí, indicó que este año unos 100 millones de personas van a caer en la pobreza extrema y 270 millones sufrirán hambre.
El exministro mexicano, tras recordar que dejará las riendas de la OCDE a finales de mayo, hizo un llamamiento para que aumenten los fondos para los países en desarrollo, y muy en particular en dirección de los más pobres, "para que podamos construir una verdadera reconstrucción".
Las aportaciones de los miembros del CAD representaron en conjunto un 0,32 % de su producto nacional bruto (PNB), frente al 0,30 % en 2019, aunque con muchas diferencias entre ellos.
Seis alcanzaron o superaron el objetivo internacional de consagrar un 0,7 %: Suecia (1,14 %), Noruega (1,11 %), Luxemburgo (1,02 %), Dinamarca (0,73 %), Alemania (0,73 %) y Reino Unido (0,70 %).
Estados Unidos fue el primer país por el volumen de su ayuda, con 35.470 millones de dólares, por delante de Alemania (28.410 millones), Reino Unido (18.560), Japón (16.270) y Francia (14.140). Pero en términos relativos se quedó entre los últimos del grupo con solo un 0,17 % de su PNB.
España aportó 2.969 millones de dólares, un 1,8 % menos que en 2019. Aun así en porcentaje del PNB subió dos décimas al 0,24 %, lo que se explica por el efecto del bajón de la actividad como consecuencia de la crisis.
Del total de fondos de la ayuda pública al desarrollo del pasado año, 12.000 millones de dólares se dedicaron a actividades vinculadas a la covid, en buena medida nuevas partidas, pero también algunas que se reorientaron.
Los gastos consagrados a los refugiados que acogen los propios países del CAD representaron un 5,6 % del total, lo que significó un aumento frente al 4,4 % que había supuesto en 2019.