Jerusalén, 17 sep (.).- Gran parte de las acciones de la aerolínea insignia de Israel, EL AL, han sido adquiridas por un joven inversor norteamericano de 27 años, que se convierte en su accionista mayoritario e intentará evitar la quiebra de la empresa.
Eli Rozenberg, estudiante de Yeshivá (escuela religiosa judía) e hijo de un empresario estadounidense, compró casi el 43% de las acciones de EL AL por 150 millones de dólares en la Bolsa de Tel Aviv a través de su compañía, Kanfei Nesharim.
La compra se produjo después de que las acciones de la aerolínea, en situación económica muy precaria por la crisis de la COVID-19, se pusieran a la venta en el mercado bursátil, según la prensa local.
En el proceso intervino el Estado israelí, que había diseñado un plan para evitar su caída. Finalmente aportó unos 30 millones de dólares y se hizo con entre el 12 y 15% de participaciones.
Israel se comprometió este verano a garantizar un préstamo de unos 250 millones de dólares para asegurar la estabilidad de EL AL, y a comprar las acciones que esta no vendiera en bolsa.
Su plan contemplaba la opción de nacionalizar la compañía si no había empresas privadas interesadas, pero el acercamiento de varios inversores y la puja final de Rozenberg lo evitó.
La crisis de la COVID-19, que ha reducido en gran medida el tráfico aéreo mundial, asestó un duro golpe a EL AL. En el primer cuarto de 2020 registró unas pérdidas de 140 millones de dólares.
Esta situación hizo que tuviera que prescindir de la mayoría de sus empleados de manera temporal, y más del 90% de su plantilla está sin trabajar con permiso no retribuido, según el digital Ynet.