Madrid, 10 ene (.).- La economía empieza a mostrar el deterioro de sus perspectivas para 2024, tendiendo a la baja del consumo, menor actividad e impacto sobre resultados empresariales y debilitamiento del mercado laboral, según Singular Bank, que prevé un recorte de tipos más lento y sitúa la Bolsa española por encima de los 10.500 puntos a cierre de año.
En la presentación de su Informe de Perspectivas 2024 titulado "Un año para despejar incógnitas", la estratega jefe, Alicia Coronil Jónsson, y el jefe de Estrategia de Singular Bank, Roberto Scholtes, han desgranado las claves económicas y bursátiles del año, para el que se muestran cautos y apuntan que los mercados están descontando ya un escenario benigno.
Scholtes ha apuntado que se prevé un mayor enfriamiento de la economía, lo que supondrá una rebaja de los beneficios empreariales y un repunte de los diferenciales crediticios.
En algún momento del próximo año, Scholtes cree que los recortes de tipos relajarán las condiciones de financiación y tocarán suelo las expectativas de crecimiento económico, y es ahí donde se espera un giro añadiendo renta variable y rotando a negocios más cíclicos, a compañías pequeñas y medianas y a los mercados emergentes.
Respecto a los tipos de interés, las previsiones apuntan en EE.UU., a una curva ligeramente por debajo de los niveles actuales, del 4 %, mientras que en el caso del BCE ha dicho que se van a descontar tipos menores de los que está descontando el mercado.
En cualquier caso, ha considerado que el potencial es mayor para las bolsas europeas, por lo que ha situado al selectivo español, IBEX 35, en el entorno de los 10.500-10.800 puntos a finales de 2024.
Asimismo, las estimaciones de Singular Bank apuntan a que el bono estadounidense a 10 años terminará el año con un interés en torno al 3,9 % y ha apostillado que será necesario recortar algo la cartera en renta fija y pasar de bonos emergentes a bonos ligados a la inflación.
"Las oportunidades de inversión en renta fija están en los activos monetarios, en la deuda pública de EE.UU.", ha subrayado.
Respecto a las divisas, Scholtes estima que el euro-dólar acabe el año en 1,12, mientras que el petróleo volverá a situarse por encima de los 80 dólares, y el precio de la onza de oro troy en los 1.800 dólares.
En cuanto a los sectores, Singular Bank considera que las energéticas, y en concreto las petroleras siguen siendo valores "tremendamente rentables"
Por su parte, Coronil Jónsson ha destacado que los bancos centrales se aproximan a un fin de ciclo de crecimiento monetario pero persisteen las tensiones inflacionistas y su impacto en los hogares, a lo que se suma la menor contribución de China al crecimiento, cuya deuda podría llegar al 80 % el próximo año.
Por tanto, ha considerado que gobiernos y empresas deberán tomar decisiones en un entorno marcado por la incertidumbre geopolítica, el cambio climático y la Inteligencia Artificial, a lo que se suman las guerras en dos zonas estratégicas.
En su opinión, la inflación no dará tregua y aunque no llegará a máximos, los repuntes no se frenaran.
Con este escenario, la estratega jefe de Singular Bank ha situado el crecimiento de EE.UU. para el próximo año en torno al 1 %, mientras que en el caso de China será algo superior al 14 % y ha destacado la importancia de India que surge como país "atractivo", con una población joven, apostando por el talento tecnológico y los centros de producción.
Entre los riesgos para 2024 ha destacado la posibilidad de que China intensifique su presión sobre Taiwán, lo que puede producir algún tipo de bloqueo, las elecciones europeas, la posibilidad de que el expresidente de EE.UU. Donald Trump vuelva al gobierno y los efectos de la IA sobre el crecimiento económico, entre otros.