Tokio, 25 abr (.).- La metalúrgica japonesa Kobe Steel (T:5406) admitió hoy que la justicia nipona ha abierto una investigación en torno al caso de manipulación de datos técnicos de algunos de sus productos que afectó a más de 600 compañías de todo el mundo.
La empresa nipona está colaborando en la investigación, dijo Kobe Steel en un escueto comunicado en el que no especificó quién está al cargo de la misma ni cuándo comenzó.
La publicación de la nota se produjo después de que el diario Nikkei informara hoy de que la fiscalía de Tokio y el departamento de policía de la capital han empezado a investigar el falseo en busca de violaciones de la ley que pudieran dar pie a cargos criminales.
Kobe Steel ya está siendo investigada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que poco después de la salida a la luz del escándalo el pasado octubre le reclamó a través de su subsidiaria en aquel país, Kobe Steel USA, documentos relacionados con los productos afectados vendidos a compañías estadounidenses.
La pesquisa judicial en Japón abre un nuevo capítulo en el escándalo que se conoció a finales de 2017 cuando Kobe Steel admitió la alteración de datos técnicos en productos de aluminio, acero, cobre, limaduras de hierro y materiales de pulverización catódica, usados en pantallas de cristal líquido.
Las acciones de Kobe Steel cayeron hoy un 3,55 % en la Bolsa de Tokio tras reconocer la existencia de la investigación.
Según el último informe presentado el 23 de marzo, los productos afectados fueron enviados a más de 600 compañías de todo el mundo de sectores que van desde el automovilístico hasta el aeronáutico, el ferroviario y el de equipamiento militar, y el falseo se producía desde los años 70 en una de sus plantas domésticas.
El fraude consistió en manipular los certificados de las inspecciones internas de algunos productos, que fueron reescritos para hacer que los datos técnicos cumplieran las especificaciones solicitadas por sus clientes, que no han informado hasta la fecha de problemas de seguridad relaciones con los materiales.
El escándalo, unido a una sucesión de infracciones similares en otros conglomerados, minó la credibilidad del sector privado japonés y causó la dimisión de Hiroya Kawasaki como presidente de Kobe Steel, cargo en el que le sucedió Mitsugu Yamaguchi.