Lisboa, 1 ago (.).- La compañía portuguesa Amorim, líder mundial en producción de corcho, ganó durante el primer semestre del año 40,4 millones de euros, lo que supone un descenso del 2,1 % respecto al mismo período de 2018.
En un comunicado enviado a la Comisión del Mercado de Valores lusa (CMVM), la empresa subrayó que se hayan mantenido unos beneficios "estables" a pesar de la "fuerte subida del precio de las materias primas".
Con todo, las ventas crecieron un 3,1 % durante el primer semestre del año, hasta los 412,2 millones de euros.
El resultado bruto de explotación (ebitda), por contra, bajó un 11,8 % hasta los 68,2 millones de euros.
El grupo, con sede en Santa Maria de Feira (norte del país), está dividido en cinco sectores: producción de tapones de corcho, aislamientos, revestimientos, materias primas y aglomerados.
Por la fabricación de tapones, su principal segmento, registró hasta junio ventas por valor de 295,7 millones de euros, un 4,7 % más que el año precedente.
La firma -que emplea a más de 3.500 trabajadores- presentaba a finales de junio una deuda líquida de 149,9 millones, según los datos publicados hoy.
Además del negocio del corcho, Amorim es uno de los principales accionistas de la petrolera lusa Galp.