Mérida, 10 may (.).- La planta de producción de diamantes sintéticos para la fabricación de semiconductores promovida por La empresa estadounidense Diamond Foundry en la localidad cacereña de Trujillo está en fase de ingeniería y de cierre de la financiación.
Así lo ha asegurado el presidente de la Unión Española Fotovoltaica, Rafael Benjumea, tras la firma de un protocolo en Mérida para fomentar la energía renovable.
Según Benjumea, la fase actual es la de terminar los proyectos de ingeniería para presentarlos a la Administración, a la vez que se avanza en las líneas de financiación públicas, que "son esenciales para el éxito del proyecto".
El proyecto, que se anunció en julio de 2021 en Mérida, supondrá una inversión de unos 670 millones de euros y la creación de 300 empleos directos.
Para Benjumea se está en una fase "menos mediática", pero que va bien y con mucho compromiso por todas las partes implicadas, en referencia al Gobierno, la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento de Trujillo y las empresas.
El acuerdo para la puesta en marcha de la planta fue rubricado por Benjumea como presidente de Kishoa Powen Energía Renovables, que se encargará de la instalación de autoconsumo solar fotovoltaico de 120 MW de potencia hibridada, de la que saldrá la energía para la fabricación de los diamantes sintéticos.