París, 8 jul (EFE).- La crisis de Grecia que empujó al CAC-40 de París a perder un 6 % en los últimos días, hasta niveles de febrero, pareció inspirar hoy por primera vez cierta confianza en los inversores, que dejaron la cuestión de China en segundo término, al igual que la víspera.
El selectivo cerró con un alza de 0,75 %, a 4.639,02 puntos, tras haber vivido un notable bajón a las 07.45 horas GMT, hasta los 4.601,90 puntos, y su mejor momento a las 12.27 GMT, a 4.671,87 enteros.
El volumen de negocios fue de 4.686 millones de euros.
La jornada alcista se dejó influir igualmente por un repunte técnico, tras cuatro bajas consecutivas, pues la inquietud por la situación griega y el desastre bursátil en China no había desaparecido.
No sólo el parqué pareció dejarse llevar por cierto optimismo. El primer ministro francés, Manuel Valls, declaró que la solicitud de un programa de ayuda, hecha hoy a sus socios por el presidente griego, Alexis Tsipras, era "un avance" que permitía dialogar.
Sólo seis títulos retrocedieron al cierre de la sesión, encabezados por el sector del automóvil con el proveedor Valeo (PARIS:VLOF) (4,61 %) y los fabricantes Renault (4,51 %) y Peugeot (2,93 %).
El alza más importante fue para la acería Arcelormittal (MADRID:MTS) (3,07 %).