Lisboa, 3 jun (EFE).- La presión que ejercen los mercados sobre la deuda soberana de Portugal bajaba hoy ligeramente en la primera sesión del mes, y en el caso de sus títulos a diez años se situó en torno al 5,6 %.
Los intereses exigidos por los inversores para comprar obligaciones lusas se mantienen relativamente estables en las últimas semanas, aunque han caído de forma notable si se comparan con los de hace un año.
Precisamente a diez años, utilizado habitualmente como el plazo de referencia, la deuda portuguesa cotizaba a principios de junio de 2012 en el entorno del 12 %, unas tasas consideradas como inasequibles por analistas y expertos.
La evolución de los intereses en el mercado secundario -donde se compran y venden los títulos adquiridos en subasta pública- refleja un pronunciado descenso de la presión de los mercados sobre Portugal motivado por una mejora de la confianza en las posibilidades del país pese a la grave crisis económica que atraviesa.
A cinco años, por las obligaciones lusas se exigía hoy un 4,38 % de rentabilidad, una tercera parte de la tasa registrada hace doce meses, mientras que por su deuda a dos años se pagaba hoy una prima del 2,73 %, lejos del 10 % de junio de 2012.
Esta tendencia a la baja se mantiene de forma casi ininterrumpida desde enero del pasado ejercicio, cuando se alcanzó el momento de mayor presión sobre Portugal y los intereses a diez, cinco y dos años se dispararon hasta superar el 17, el 21 y el 22 %, respectivamente.
Este alivio llega en un momento clave para el país, que espera poder volver a emitir con normalidad deuda a largo plazo en los próximos meses.
Por el momento Portugal ya ha subastado obligaciones dos veces en 2013, una novedad desde que solicitara el rescate financiero, y en ambos casos logró colocar toda su emisión aunque a cambio de unos intereses todavía considerados como demasiado altos por los analistas. EFE