Madrid, 12 may (.).- El repunte de la inflación en Estados Unidos (EE.UU.) ha castigado a Wall Street pero no ha pasado factura a las bolsas europeas, que se han visto beneficiadas por la mejora de las previsiones macroeconómicas de la Comisión Europea (CE) y por las menores tensiones inflacionistas en las grandes economías del Viejo Continente.
La evolución de los precios, que aumenta el temor de los inversores a una retirada prematura de los estímulos monetarios, sí ha disparado las rentabilidades de la deuda pública en las dos orillas del Atlántico.
El Ibex 35, el principal índice de la Bolsa española, ha subido hoy un 0,23 % y ha recuperado el nivel de los 9.000 puntos.
En una sesión marcada por las dudas, el selectivo ha sumado 20,5 puntos y ha cerrado en 9.007,7. En lo que va de año, avanza un 11,6 %.
En el resto de Europa, Londres ha subido un 0,82 %; Milán, un 0,23 %; Fráncfort, un 0,2 %; y París, un 0,19 %.
En Asia, antes de conocerse el dato de inflación en EE.UU., Tokio había bajado un 1,61 % y Seúl, un 1,49 %, pero Hong Kong había ganado un 0,78 %.
En Wall Street, los principales índices -Dow Jones, S&P 500 y Nasdaq- han reaccionado con pérdidas a la evolución de los precios en Estados Unidos. Los mayores descensos corresponden al Nasdaq, que engloba a las grandes empresas tecnológicas.
Los precios subieron un 0,8 % intermensual en abril en EE.UU. y un 4,2 % interanual, el incremento más alto desde 2008.
Este repunte, superior al previsto por los analistas, aumenta las posibilidades de que la Reserva Federal empiece a retirar los estímulos monetarios.
El miedo de los inversores ha sido menor en Europa, donde la recuperación es más incipiente que en la potencia norteamericana, lo que deja mayor margen de actuación al Banco Central Europeo (BCE).
Andrés Aragoneses, analista de Singular Bank, destaca que la inflación también ha repuntado en Europa, pero a niveles inferiores a los registrados en Estados Unidos.
En Alemania, la inflación interanual se situó en abril en el 2 %, mientras que en Francia se quedó en el 1,2 %.
Además, la CE ha elevado hoy sus previsiones de crecimiento para la zona del euro y la Unión Europea (UE) en 2021 y 2022.
El Ejecutivo comunitario calcula que el producto interior bruto (PIB) crecerá un 4,3 % este año en la eurozona y un 4,2 % en la UE. Para 2022, Bruselas prevé un crecimiento del 4,4 % en ambos casos.
Según Aragoneses, "la mejora de las previsiones de la CE ha reafirmado las expectativas de una recuperación económica en los próximos meses, una vez que se estabilice la situación epidemiológica y se reduzcan las restricciones a la movilidad".
En el mercado de deuda, las rentabilidades suben con fuerza tanto en Europa como en EE.UU.
El interés del bono español a diez años, el de referencia, repunta hasta el 0,558 %, el nivel más alto desde junio de 2020.
La rentabilidad del bono estadounidense, el que más preocupa a los inversores, sube hasta el 1,681 %.
En el mercado de divisas, el euro pierde terreno frente al dólar y se cambia a 1,207 unidades.
En el mercado petrolero, los precios suben pese a que los inventarios de crudo han descendido menos de lo previsto en EE.UU. La razón es que la actividad de las refinerías se ha ralentizado.
El Brent, el crudo de referencia en Europa, se revaloriza un 1,1 % hasta 69,3 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI), referente en EE.UU., avanza ese mismo porcentaje, hasta 66 dólares.
El precio del oro, uno de los activos refugio, cae por debajo de los 1.822 dólares por onza.