Madrid, 11 may (.).- La Sareb, la sociedad que se creó para dar salida a los activos inmobiliarios de la banca rescatada, da un paso más en su compromiso social y ofrecerá un alquiler social a 10.000 familias vulnerables que ya residen en sus viviendas y a las que acompañará para que superen su situación de exclusión.
Además, la compañía ha puesto a disposición del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones 885 viviendas para dar acogida a refugiados ucranianos, la mayor parte de ellas en el litoral mediterráneo.
No obstante, también hay viviendas en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia y La Rioja.
Volviendo a la iniciativa del alquiler social a casi 10.000 familias que ya viven en inmuebles de la Sareb, en los próximos meses, la compañía incorporará gestores especializados en mediación y alquiler social, al tiempo que pondrá en marcha un plan de acompañamiento social y de trabajo, de la mano de expertos en la materia.
La gestión de este parque de casi 10.000 viviendas incluirá "una colaboración intensiva" con las administraciones competentes en la materia, especialmente con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, según ha explicado la Sareb.
Tras un proceso competitivo, el llamado "banco malo" ha elegido para este nueva tarea a la compañía Servihabitat, que complementará su actuación con una alianza estratégica con Sogemedi y Gesocin, proveedores de servicios sociales con experiencia en mediación, seguimiento y reinserción laboral.
Esta estructura de gestión de un parque cercano a las 10.000 viviendas operará de forma independiente a los servicios de gestión del resto del parque inmobiliario de la Sareb, entre los que se encuentran los activos destinados a la venta o a la promoción.
La nueva iniciativa de la Sareb llega después de que el Estado haya tomado el control de la compañía, pero se enmarca en el trabajo que ya venía desarrollando en materia de vivienda social mediante acuerdos de cesión o venta de inmuebles a administraciones públicas, o mediante la gestión de su propio parque social, que le ha permitido ya regularizar con contratos directos de alquiler a 1.115 familias.
Por otro lado, la Sareb mantiene su compromiso de ceder a comunidades y ayuntamientos hasta 15.000 viviendas, de las que han solicitado hasta el momento unas 3.300 unidades, ya que casi 12.000 pisos siguen sin ser reclamados por las administraciones.