Bruselas, 17 jun (.).- El Consejo de la Unión Europea (los países de la UE) adoptó este lunes una modificación del reglamento de la Empresa Común Europea de Informática de Alto Rendimiento (EuroHPC) para poner su capacidad al servicio de pymes y empresas emergentes de Inteligencia Artificial, conocidas como “fábricas de IA".
Con el reglamento adoptado hoy, la empresa común EuroHPC promoverá y explotará fábricas de IA, instalaciones que deberán incluir un superordenador de IA, un centro de datos asociado y servicios de supercomputación orientados a la inteligencia artificial, explicó el Consejo en un comunicado.
Las actividades cubiertas por las fábricas de IA estarán abiertas a usuarios públicos y privados, con condiciones de acceso ‘ad hoc’ para nuevas empresas y pymes.
Las entidades anfitrionas de las fábricas de IA tendrán derecho a recibir ayuda financiera de la Unión Europea (UE) para cubrir hasta el 50 % de los costes de adquisición de los superordenadores de IA, y hasta el 50 % de sus costes de funcionamiento.
Los superordenadores de IA se utilizarán principalmente para desarrollar y probar modelos, aplicaciones y soluciones de formación en inteligencia artificial, indicó el Consejo.
En los próximos días, la modificación del mencionado reglamento se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea y entrará en vigor 20 días después.
La empresa común EuroHPC se creó en 2018 para coordinar los esfuerzos para hacer de Europa un líder mundial en supercomputación.
Hasta ahora, sus principales objetivos han sido desarrollar, desplegar, ampliar y mantener el ecosistema de supercomputación, computación cuántica e infraestructura de datos de la UE; promover su uso; apoyar el desarrollo de componentes, tecnologías y conocimientos de sistemas de supercomputación, y apoyar el desarrollo de habilidades informáticas para la ciencia y la industria europeas.
Desde su creación, EuroHPC ha adquirido nueve superordenadores repartidos por toda Europa.
En enero pasado, la Comisión propuso un reglamento para modificar el marco jurídico actual introduciendo un objetivo adicional para la empresa común: apoyar el desarrollo de un ecosistema de IA en la UE mediante el desarrollo y la explotación de fábricas de inteligencia artificial.
Los Estados miembros alcanzaron un acuerdo político sobre la modificación el pasado 23 de mayo.