Investing.com - Las acciones europeas permanecieron a la baja este jueves, lastradas por las pérdidas en el sector financiero y por la cautela de los inversores a la espera de la publicación de los datos económicos de Estados Unidos, prevista para el transcurso de la jornada y ante los nuevos problemas políticos en Italia.
Durante la tarde de la sesión de negociación en Europa, el EURO STOXX 50 retrocedió un 0,51%, el CAC 40 francés perdió un 0,32% y el DAX 30 alemán protagonizó una caída del 0,25%.
Los inversores aguardaban el dato sobre ventas minoristas de Estados Unidos ante la preocupación generada por la bajada de las ventas de enero tras una subida del 0,2% en diciembre. Los últimos informes sobre empleo, bastante negativos, han ocasionado preocupaciones en torno a si la recuperación de Estados Unidos habrá perdido fuelle desde finales del año pasado.
En la zona del euro, el primer ministro de Italia, Enrico Letta, se reunió este miércoles con el líder del centro-izquierda Matteo Renzi para decidir si, llegado el caso, Letta le cederá su puesto como dirigente del Gobierno de coalición menos de un año después de asumir el cargo.
El grupo de liderazgo del partido democrático de centro-izquierda había acordado reunirse este jueves y podría decidir si seguirá apoyando al primer ministro.
La mayoría de los valores financieros perdió posiciones: las entidades de crédito francesas BNP Paribas y Société Générale retrocedieron un 3,86% y un 0,61%, respectivamente, mientras que el alemán Deutsche Bank se dejó un 0,97%.
BNP Paribas declaró al comienzo de la jornada que su resultado neto retrocedió considerablemente hasta quedar en 127 millones de euros, frente a los 519 millones de EUR del año anterior, después de que la entidad destinara 1.100 millones de USD a una revisión de pagos a partidos sujetos a sanciones económicas de Estados Unidos. Este ha sido su resultado trimestral más bajo desde 2008.
Entre los emisores periféricos, las entidades italianas Intesa Sanpaolo y Unicredit se desplomaron un 1,81% y un 1,99% cada una mientras que los bancos españoles Santander y BBVA se dejaron un 1,09% y un 1,52%, respectivamente.
Por su parte, las acciones de Renault se dispararon un 5,63% después de que el fabricante galo de automóviles anunciara que sus resultados de explotación correspondientes al conjunto de un ejercicio avanzaron un 59% ya que los modelos de bajo coste de la división Dacia impulsaron un aumento de las entregas y la marca automovilística redujo costes.
En Londres, el FTSE 100 perdió un 0,56%, pues las entidades de crédito británicas reprodujeron la evolución a la baja de sus homólogos continentales.
Las acciones de HSBC Holdings y las de Royal Bank of Scotland perdieron un 0,37% y un 1,79% cada una, mientras que Barclays y Lloyds Banking se desplomaron un 2,53% y un 3,94% respectivamente.
Lloyds registró su cuarta caída consecutiva anual tras la asignación de 3.500 millones de GBP en fondos para indemnizar a sus clientes por los errores en la venta de seguros de crédito y permutas financieras.
En cuanto al sector de la minería, las acciones retrocedieron por lo general: BHP Billiton y Río Tinto perdieron un 1,02% y un 0,68% cada uno, mientras que los rivales Glencore Xstrata, y Vedanta Resources se desplomaron un 1,54% y un 2,34%, respectivamente.
Al comienzo de la jornada, Rio Tinto anunció que sus beneficios subyacentes avanzaron hasta los 10.200 millones de USD, sobrepasando la media estimada de 9.700 millones de USD.
Los mercados bursátiles de Estados Unidos se posicionaron para una apertura a la baja. Los futuros sobre el Dow Jones Industrial Average y el S&P 500 apuntaron ambos a un retroceso del 0,43% y el Nasdaq 100 se dejó un 0,46%.