Madrid, 15 jul (.).- La Bolsa española ha retomado las ganancias semanales al subir en las últimas cinco sesiones el 4,22 %, un alza propiciado por los máximos registrados en Wall Street y la mejora experimentado por las divisas, sobre todo la libra, tras el desplome que sufrió tras el "brexit".
De esta manera, el principal selectivo, el Ibex 35, intenta recuperar parte de las pérdidas que registró hace tres semanas, cuando se vio fuertemente afectado por la decisión de los británicos de abandonar la UE.
Antes de conocerse el resultado del referéndum celebrado el pasado 23 de junio en el Reino Unido, el mercado cotizaba en 8.885,30 puntos, nivel todavía superior a los 8.531 puntos en que terminado esta semana.
El lunes la Bolsa abrió al alza, con una revalorización del 1,46 %, gracias al fuerte repunte de Tokio y los máximos de Wall Street.
En Japón, el partido del primer ministro, Shinzo Abe, consiguió una clara victoria en las elecciones legislativas, lo que le ayuda a reforzar su liderazgo, y daba un espaldarazo al programa "Abenomics" de reforma económica.
Tras el apoyo electoral, Abe anunció que prepara una nueva serie de medidas de estímulo para reactivar el crecimiento económico, lo que favoreció a la bolsa de Tokio, que subió casi un 4 %.
En estas ganancias se apoyó la Bolsa de Madrid, donde el sector financiero acusaba las dudas que pesan sobre la banca italiana.
El mercado también celebró los máximos de la bolsa de Londres, donde la libra acogió de forma positiva el anunció de que Theresa May será la sucesora de David Cameron al frente del Gobierno británico tras la renuncia de la defensora del "brexit" Andrea Leadsom.
La mejoría de la libra contagió al euro y al precio del crudo, lo que ayudó al Ibex a subir el 2,42 % el martes, en la que fue su cuarta sesión consecutiva de ganancias.
Esa vuelta de la confianza de los inversores a la renta variable propició la mejora del mercado de deuda, donde el Tesoro colocó letras a seis y doce meses a interés aún más negativos.
Los ministros de Economía y Finanzas de la UE, el Ecofin, anunciaron que continuará el proceso para sancionar a España y Portugal por no cumplir con la reducción del déficit.
Un hecho que quedó eclipsado por los máximos de Wall Street.
Pero tras cuatro jornadas consecutivas en positivo, en las que había sumado un avance de más del 7 %, el miércoles, el mercado nacional se decantó por una leve recogida de beneficios.
Ese día, en el que el primer ministro británico, David Cameron, presentó su dimisión y cedió el Gobierno a Theresa May, el Ibex cayó el 0,38 %, pese al fuerte impulso de la banca.
Y es que el sector financiero celebró la decisión del abogado general del Tribunal de Justicia de la UE, que se posicionó en contra de la retroactividad de las cláusulas suelo.
Esta conclusión elevó fuertemente a la banca cotizada en una jornada que no obstante, el mercado cerró a la baja tras continuos vaivenes.
Esa volatilidad cesó el jueves, cuando de nuevo, el Ibex subió el 0,93 % y consolidó los 8.500 puntos, animado otra vez más por el alza de la libra y el petróleo, y pese a que el Banco de Inglaterra decidió mantener intactos los tipos de interés.
Aunque la decisión decepcionó a los inversores, que esperaban una bajada al 0,25 % tras el "brexit", el organismo sí dejó la puerta abierta a hacerlo en agosto.
El mantenimiento de los tipos sí fue celebrado por la libra, que subió con fuerza, al igual que el precio del petróleo.
El alza del crudo también propició nuevos récord en Wall Street, que sirvieron de estímulo a la Bolsa, que no obstante, cerró el viernes con unas pérdidas del 0,25, en una jornada marcada por el atentado terrorista en Niza (Francia).
Al cierre de la semana, la libra cotizaba a 1,32 dólares, frente a 1,29 dólares de una semana antes; y el precio del crudo, a 47,67 dólares, frente a los 46,76 del viernes pasado..
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