Madrid, 23 ene (.).- La entidad de banca privada suiza Lombard Odier prevé un escenario en el que el Banco Central Europeo (BCE) comience a rebajar los tipos de interés en primavera si se mantiene la actual senda de la inflación.
La presidenta del BCE, "(Christine) Lagarde, está en posición de rebajar tipos", ha apuntado Samy Chaar, economista jefe de la firma, que ha asegurado que no solo por la inflación, sino también por una mayor debilidad en el crecimiento, en un encuentro online con los medios de comunicación para presentar las perspectivas de la firma para 2024.
A pesar de que Lagarde apuntó en una reciente entrevista en el foro de Davos de que era probable que los recortes de tipos llegaran en verano, los analistas de esta firma prevén un escenario en el que las bajadas lleguen antes.
Chaar ha añadido que si siguen viendo que la inflación va en "la dirección correcta" no consideran que sea necesario que el organismo espere al verano si la inflación lo está haciendo bien.
"El jurado será la inflación", ha apostillado el experto y ha añadido que habrá que observar los indicadores de enero, febrero y marzo, pero que espera que si no es abril sea en mayo, más que en verano.
Los analistas de esta firma de banca privada estiman que habrá cuatro bajadas de 25 puntos básicos en 2024 por parte del BCE y que la Reserva Federal (Fed) hará lo mismo.
Desde Lombard Odier consideran que existen varios riesgos geopolíticos que pueden producirse en 2024 en un escenario con varias citas electorales, entre ellas en Estados Unidos, donde observan que el ascenso de Donald Trump puede tener un efecto sobre los mercados.
Michael Strobaek, global CIO (responsable de la gestión de la cartera de valores) de Lombard Odier, ha señalado que observan de cerca la situación en EEUU, donde consideran que los riesgos de una posible victoria de Trump estarían más en el exterior por su posible impacto en el conflicto de Oriente Medio o en el de Ucrania.
Respecto al conflicto del Mar Rojo, han apuntado que ha conllevado un incremento del coste de los fletes, pero que no se trata de una "importante disrupción" para el comercio.
Aunque han indicado que la clave está en cuánto pueda durar porque si se alarga podría tener un efecto en la inflación.