Alejandro Cuevas Vidal
Madrid, 1 ene (.).- Juguetes, luces decorativas y adornos son protagonistas de las fiestas navideñas, momento clave para fabricantes y comerciantes de este tipo de productos, con avances en 2023 a distinto ritmo, afectados por la inflación y la vuelta del turismo.
La Navidad aglutina más del 60 % de las ventas anuales de juguetes, en la que las semanas del 25 de diciembre y el 6 de enero concentran en torno al 10 % del total, lo que las convierte en las más importantes del ejercicio, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ).
El director de la patronal, José Antonio Pastor, indica a EFE que el sector prevé mantener la facturación del año anterior, cifrada en 1.699 millones de euros, con un posible crecimiento del 1 % del consumo nacional y una caída pronosticada entre el 2 y el 3 % de las exportaciones.
La subida de los tipos de interés, el encarecimiento de materias primas empleadas en los distintos artículos y el descenso de la natalidad influyen en la producción de juguetes y por ende pueden subir su precio, aunque las empresas tienen el objetivo de "ofrecer el más competitivo a los consumidores".
La organización apunta que los españoles gastan en torno a 200 euros por niño al año, de los que buena parte se destinan a construcciones, juegos de mesa, muñecas y juguetes licenciados -aquellos apoyados en otras marcas-, los productos que anotan un mejor comportamiento en el presente ejercicio.
Las luces decorativas siguen en alza
El ámbito de la iluminación artística avanza con fuerza en la presente campaña tras superar la crisis de suministros que ralentizó la llegada de materiales del Lejano Oriente, como luces led, el año pasado y con la previsión de elevar sus ganancias en Navidad, periodo que supone hasta el 80 % de la facturación de alguno de los actores del sector consultados por EFE.
Electromiño -que suministra a casi 50 municipios gallegos- marca un crecimiento interanual del 10 % en los pedidos, mientras que Isedex - que atiende a 200 localidades de Extremadura, Andalucía y Portugal- cifra la mejora en un 15 % y, en su caso, apuntan a récord en 2023, pese a preceder a un año electoral como fue 2022, en el que se acostumbran a multiplicar los encargos.
"Desde que se popularizó el alumbrado de Vigo el negocio ha crecido de forma muy estable y ya no hay años mejores y peores, ya que los ayuntamientos empiezan a ver las luces como algo en lo que invertir y no solo un elemento festivo", explica el gerente de Isedex, Marcelo Pérez, a EFE.
Entre las empresas que iluminan las calles en Navidad, destaca Ximénez Iluminación, con un volumen de negocio de 60 millones de euros y 250 ciudades de todo el mundo entre sus clientes, como Nueva York, Londres, Bruselas, Doha, Denver, Los Ángeles o Ciudad de México.
Hay que remarcar que el montaje de estructuras luminosas se ha encarecido al duplicarse el coste del aluminio y elevarse entre el 15 y el 20 % el del led, lo que ha aumentado los precios de algunos de los fabricantes consultados.
Este escenario, unido a los nuevos pedidos en determinados casos, se traduce en una escalada del 7,5 % del gasto en luces respecto al año pasado en Madrid -con un desembolso de 4,3 millones de euros, el mayor de España-, del 45 % en Valencia o del 51 % en Pamplona.
El turismo refuerza la Navidad
Bajo el brillo de las luces, los mercados navideños abren sus puertas con el ojo puesto en la inflación, que afecta a los hábitos de consumo de la ciudadanía.
"El gasto de las familias se resiente por la subida del coste de vida", afirma a EFE el dinamizador de la Fira de Nadal de Sagrada Familia (Barcelona), Carlos González, quien añade que los precios de los productos "no se han subido para amoldarse a la situación de los hogares".
Pese a la tibieza consumista, el mercado barcelonés estima repetir las ventas de 2022, cubrir la inversión de 200.000 euros para su instalación y avanzar hacia los datos prepandemia, debido a la recuperación de las compras turísticas.
Los tenderos de la Fira de Nadal de Santa Llúcia, ubicada también en la capital catalana, esperan un comportamiento similar a su homólogo y prevén alcanzar los resultados de las pasadas fiestas.
El mercado navideño de la Plaza Mayor de Madrid reporta también una mayor afluencia de turistas, que podría ayudar a cerrar la temporada con unas ventas entre el 3 y el 5 % más altas que en 2022.
Precisamente, Caganer.com, dedicada a la venta de este tradicional elemento del belén, incrementará sus ventas un 10 % este año gracias a la recuperación turística, hasta superar los niveles prepandemia.
Más allá de su puesto en Santa Llúcia, las cinco tiendas de la empresa en España reciben una media de 100.000 visitantes, lo que ha derivado en la triplicación de la producción, al pasar de 40.000 unidades en 2021 a 120.000 en 2023, y el refuerzo de la plantilla hasta los 50 trabajadores.
"Nuestra estrategia de abrir tiendas, ideada en la pandemia, nos ha permitido hacer que la Navidad ya no sea indispensable", remarca a EFE el director ejecutivo de Caganer.com, Marc Alós, quien puntualiza que las ventas en esta época del año han pasado de representar el 80 % a ser el 20 %.