Madrid, 29 jun (.).- La cartera de pedidos de los astilleros españoles sólo se redujo un 2 % en 2020 respecto a 2019, con un total de 44 buques, pese a la pandemia de covid-19, descenso muy inferior frente a los de la UE y el resto del mundo (un 20 % de unidades menos), según Pymar.
España ha vuelto a posicionare entre los primeros puestos en el ranking internacional de contratación, alcanzando la tercera posición de la UE, con 18 nuevos contratos por importe de 530 millones de euros, ha destacado este martes la consejera delegada de Pymar, Almudena López del Pozo, tras la junta general de accionistas de la sociedad.
Los astilleros españoles también han mantenido "una destacada actividad" en el segmento de reparación, mantenimiento y transformación naval, con más de 700 grandes actuaciones y una facturación de 335 millones de euros, sólo un 15 % por debajo de los valores medios de los "excelentes" cuatro años anteriores.
La industria naval contribuye de forma directa a la economía española con 3.800 millones de euros y genera un impacto de más de 9.200 millones, además de aportar más de 70.000 empleos, con un efecto generador de tres empleos en el conjunto de la economía española por cada ocupado en el sector, ha agregado.
La junta se ha celebrado con el foco puesto en la propuesta de Perte del Naval para la transformación de la cadena de valor del sector, que se encuadra en el contexto del plan de recuperación, transformación y resiliencia para la ejecución de los fondos europeos y que la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, confía en que pueda ser anunciado pronto.
La propuesta "constituye una oportunidad de oro para el futuro de la industria naval", que cuenta con unas características óptimas para completar la actual oferta constructiva ante el inminente aumento de demanda de la eólica marina flotante prevista para los próximos años, ha explicado López.
La ministra, por su parte, ha asegurado que el Gobierno está "plenamente comprometido" con el sector naval, que juega un papel relevante en el ecosistema industrial español, el cual se va a reforzar con la puesta en marcha del plan de recuperación, transformación y resiliencia, ya aprobado por la Comisión Europea (CE).
Este plan, que supone una oportunidad "extraordinaria y única" para afrontar la doble transición del sector naval -digital y ecológica-, va a permitir a situar a la industria como un pilar clave para la recuperación económica en el corto plazo y para impulsar un programa de profunda modernización que tenga un impacto más estructural en el medio y largo y contribuya al crecimiento sostenible e inclusivo de nuestro país, ha apuntado.
Maroto ha añadido que el Gobierno trabaja en un nuevo real decreto para la consolidación de las ayudas al sector naval en materia de i+D+i que se aprobará en las próximas semanas y que incorpora mejoras con respecto a la normativa anterior, para dar la oportunidad a determinadas empresas, sobre toda de la industria auxiliar, a participar en proyectos de colaboración con astilleros.
Se elimina el límite de ayuda, con el fin de evitar que el tamaño del buque condicione la ayuda recibida; se amplía el plazo para presentar la documentación de 3 a 4 meses, y se incrementa el límite máximo anual de gasto de 15 millones a 20 millones de euros, un real decreto que, desde 2018 hasta la fecha, ha permitido movilizar 12 millones de euros (4 millones en el primer semestre de 2021), ha detallado.