Sao Paulo, 16 jul (EFE).- Un mal día de los bancos privados brasileños tumbó hoy la bolsa de Sao Paulo, que después de cuatro sesiones al alza, bajó el 0,46 % y su índice Ibovespa, principal indicador de la plaza, terminó en los 55.717 puntos.
El selectivo Ibovespa, que aglutina a las mayores empresas de Brasil, había llegado el martes a un máximo anual y hoy retrocedió, principalmente, debido a la caída del sector bancario, inmobiliario y siderúrgico.
Itaú y Bradesco, los dos principales bancos privados del país, se vieron afectados por un informe de Moorgan Stanley, que rebajó la nota de sus acciones por la exposición de las cuentas de estas empresas al empeoramiento de los datos de desempleo en Brasil.
Las acciones preferenciales del Itaú, segundas más negociadas en la bolsa por detrás de las de la petrolera Petrobras, bajaron un 2,59 % y las del Bradesco cayeron un 3,28 %.
Los títulos preferenciales de Petrobras, las más buscadas, subieron un 0,26 % y las similares del gigante minero Vale ganaron un 1,78 %.
La mayor alza del día correspondió a la pronunciada subida del 12,82 % de la operadora de telefonía Oi, después de que anunciara cambios en su acuerdo de fusión con Portugal Telecom.
Los cambios en el acuerdo entre las operadoras se deben a las dificultades financieras del portugués Banco Espírito Santo, que financiaba parte de la operación.
Entre las acciones que terminaron en rojo, sobresalió la caída del 4,57 % de los títulos ordinarios la compañía de logística ALL América Latina.
El volumen de negocios alcanzó los 6.708 millones de reales (unos 3.018 millones de dólares), en un total de 944.672 operaciones financieras.
En el mercado de cambios, el real se depreció hoy un 0,04 % frente al dólar, moneda que cerró negociada a 2,220 reales para la compra y a 2,222 para la venta en el tipo de cambio comercial.