Madrid, 21 feb (.).- Los cruceros que atraquen en el puerto de Barcelona no usarán agua de la red pública de la ciudad sino que empleará la que desalinizan en sus propios barcos o se abastecerán en otros puertos, ante la situación de sequía de la ciudad, ha explicado este jueves el director general de MSC Cruceros, Fernando Pacheco.
En un encuentro con medios de comunicación, Pacheco ha señalado que los barcos de la compañía ya usan agua desalinizada, que luego vuelven a verter al mar una vez usada y depurada, pero en el caso de Barcelona se abastecerán de agua potable si es necesaria antes en otros puertos.
Toda la industria, a través de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), alcanzó un acuerdo el pasado 1 de febrero con el puerto de Barcelona para no cargar agua en la ciudad mientras dure la fase de emergencia por sequía.
Algunos buques de crucero pueden llegar ya a producir más del 90 % del agua dulce que necesitan, según CLIA, que señala que los barcos de crucero representan el 0,09 % del consumo de agua de la ciudad de Barcelona.
Sale del mar Rojo y refuerza España
Pacheco ha explicado que han reordenado la oferta como consecuencia de la tensión en Oriente Medio, ya que la situación en el mar Rojo está provocando una desviación de turistas a España.
La naviera ha cancelado un crucero por el mar Rojo, con escalas en Jordania, dos puertos egipcios y Arabia Saudí y ha trasladado el barco a Valencia, ciudad en la que por primera vez tendrá un buque.
También han cancelado un recorrido que salía de Atenas y tocaba Turquía e Israel, que empezó a operar en 2023, y ha derivado el barco a Barcelona, donde tendrá cuatro barcos.
Estas tensiones han provocado también un aumento de la demanda a los fiordos noruegos. No perciben caídas en Grecia aunque ese mercado tampoco está creciendo.
Incidencia positiva en las ciudades
Por otro lado, Pacheco ha señalado que están trabajando con el Ayuntamiento de Barcelona y la autoridad portuaria, "con buenas percepciones", para tratar de explicar a la ciudadanía los beneficios que reporta esta industria, dado que se trata de la ciudad donde más contestación social recibe este turismo.
Según las cifras de un estudio de la Universidad de Barcelona, los turistas que llegan a esta ciudad en barco de crucero representan el 4,1 % del total de los que recibe pero los ingresos que dejan en impuestos turísticos municipales llegan al 13 %.
MSC confía en superar en este 2024 las cifras de 2023, cuando movieron en torno a un 54 % de los 600.000 pasajeros que usaron los cruceros en España. En ventas, aunque sin concretar más, esperan subir entre un 10 y un 15 %.
No son cifras récord de viajeros en el segmento de cruceros, que registró mejores datos en 2011 y 2012, cuando llegaron a los 700.000, aunque sí ha subido considerablemente importe medio de gasto, del que no facilitan datos.
La naviera, con 22 barcos en circulación y otros cuatro en proyecto que recibirá hasta 2028, invertirá 10.000 millones de euros en los próximos años y 18.000 nuevas cabinas para pasajeros.
La segunda radiografía del viajero elaborada por esta compañía refleja que el crucero se populariza como opción turística, con la Comunidad Valenciana y Cataluña como las comunidades más aficionadas a este tipo de viaje, aunque donde más se venden es en Madrid.
Indica también que los españoles han vuelto a planificar sus viajes con más antelación, en línea con las costumbres de antes de la pandemia, de manera que la compañía ya tiene vendido más del 60 % de su cartera para el verano.
Viajar fuera de temporada está cogiendo fuerza, con lo que si antes este segmento representaba en torno a un 15 % de la venta ahora llega al 20 %, debido fundamentalmente a los mejores precios y al menor volumen de gente en destino.
La comodidad es unos de los motivos que alegan quienes eligen estos barcos. De hecho, MSC transportará este año unos 50.000 pasajeros en autobús hasta los puertos de salida desde distintos puntos del país, para facilitar los traslados.