Washington, 25 jul (.).- Problemas de producción en Norteamérica, malos resultados en Europa y fuertes pérdidas en China provocaron la caída del 48 % de los beneficios netos de Ford (NYSE:F) en el segundo trimestre del año y del 23 % en los primeros seis meses de 2018.
El presidente y consejero del Grupo Ford, Jim Hackett, reconoció hoy durante una conferencia telefónica con analistas financieros y medios de comunicación que estaba muy decepcionado con los resultados y que no eran aceptables para la compañía.
En términos similares se expresó el director financiero de Ford, Bob Shanks, quien reconoció que el segundo trimestre del año fue "muy duro" para la compañía automovilística.
Y Jim Farley, presidente de Mercados Globales de Ford, afirmó que los resultados en Europa y Asia eran "inaceptables" para la compañía.
Farley reconoció que Ford tiene que "rediseñar" sus operaciones en Europa.
Hackett, nombrado en el puesto en mayo de 2017 para mejorar la cotización de Ford en los mercados financieros pero que en realidad solo ha conseguido que los títulos de Ford cerrasen hoy a 10,52 dólares la acción, 0,5 dólares menos que hace un año, intentó ser más positivo.
En un comunicado, Hackett aseguró que los resultados del segundo trimestre son "sólidos", perjudicados solo por "problemas inesperados" en las operaciones en el extranjero y "vientos en contra en el ambiente empresarial".
"A pesar de ello, nuestras acciones de mejora siguen afianzándose y estamos claramente comprometidos a rediseñar y reestructurar las partes de nuestra empresa que no están alcanzando el rendimiento adecuado", añadió Hackett.
Pero la compañía advirtió de que los resultados en Asia y Europa repercutirán de forma negativa en las cuentas del año por lo que se vio obligada a reducir sus expectativas económicas para el conjunto del año.
Ford anunció que para este año espera unas ganancias ajustadas por acción de entre 1,3 y 1,5 dólares, cuando anteriormente había establecido la horquilla entre 1,45 y 1,7 dólares por título.
Hackett explicó que, ante la situación, la empresa redoblaría sus esfuerzos de reestructuración, que la compañía dijo podrían costar unos 11.000 millones de dólares de tres a cinco años.
Entre las regiones más afectadas por los recortes en los próximos años se encuentran Sudamérica, Oriente Medio y África.
Pero tanto Hackett como Shanks se resistieron a ofrecer detalles sobre los recortes que se producirán.
"Sólo podemos compartir la información de forma pública una vez se hayan tomado las decisiones. No es tan sencillo como desconectarse y salir de los mercados en los que estamos", se escudó Hacket.
La reducción de las ganancias en la primera mitad de 2018 se produjo a pesar de que los ingresos de Ford aumentaron a 74.917 millones de dólares durante el periodo, un 2,3 %.
Y ello a pesar que los ingresos se redujeron en el segundo trimestre algo más del 2 %.
Al mismo tiempo, los costes y gastos de la empresa aumentaron a 79.172 millones de dólares, un 4,2 % más que en el primer semestre de 2017. En el segundo trimestre este capítulo se mantuvo prácticamente idéntico en 38.334 millones de dólares.
Por regiones y en el segundo trimestre, los ingresos en Norteamérica cayeron en 800 millones de dólares, a 23.700 millones, mientras que en Sudamérica se mantuvieron estables en 1.500 millones de dólares.
En Europa, los ingresos aumentaron en 500 millones de dólares a 7.600 millones. En Oriente Medio y África los ingresos crecieron en 200 millones de dólares a 800 millones.
Finalmente, en Asia-Pacífico, los ingresos se redujeron en 1.100 millones de dólares a 2.300 millones. Sólo en China y en el segundo trimestre del año, Ford perdió 483 millones de dólares.
Shanks reconoció que la compañía tiene mucho trabajo que hacer y que los resultados en el gigante asiático "son muy decepcionantes".