Mateo Sancho Cardiel
Nueva York, 20 ene (EFE).- Wall Street vivió hoy un reñidísimo pulso entre las ganancias y las pérdidas, que se fueron turnando a lo largo de la sesión que empezó y terminó en verde, pero transitó por el rojo la mayor parte de la jornada.
En un día de resultados empresariales en general decepcionantes (con permiso de Delta) y con un nuevo episodio de caídas en los precios del crudo, los inversores volvieron a mostrar su desconcierto a la hora de descodificar la actualidad económica.
Los más pesimistas perdieron la batalla, a pesar de contar con los argumentos más fuertes.
A saber: la crisis de exceso de oferta de "oro negro" sigue no solo sin encontrar una solución a corto plazo, sino contagiando al crecimiento económico a nivel mundial.
Ayer, día festivo en Estados Unidos, los mercados no pudieron reaccionar a las previsiones de ralentización del crecimiento de la economía realizadas por el FMI, pero hoy China informó que su crecimiento está en los índices más bajos de los últimos 25 años.
Además, tres empresas anunciaron resultados por debajo de las expectativas. Morgan & Stanley, Johnson & Johnson y, ya tras el cierre, IBM, no cumplieron lo esperado y cerraron en rojo.
Delta, a pesar de unas cifras incluso peores, desvió la atención hacia las perspectivas de 2015 y sus inversores mordieron el anzuelo, pues sus acciones se dispararon.
Durante un momento, las preocupaciones dominaron el parqué y el Dow Jones llegó a perder más de 130 puntos. Sin embargo, a partir de la media sesión, el grupo de los optimistas decidieron empezar una gran remontada.
No contentos con convertir las cuentas de Delta en una buena noticia, esgrimieron el argumento de que quizá el jueves el Banco Central Europeo (BCE) presente oficialmente su plan para la compra de deuda de los países de la zona euro.
En Nueva York quisieron, hoy sí, contagiarse de las buenas cifras de cierre en los parqués europeos, a pesar de que el euro camina hacia la paridad con el dólar.
Y, en la recta final de la jornada, se apoyaron en la labor de compensación que el sector tecnológico (que subió un moderado 0,56 %) hizo respecto a las caídas en el sector energético (que perdió un 0,83 %).
Así las cosas, el más tecnológico de los índices, el Nasdaq, acabó cerrando con casi medio punto porcentual de ganancias. El selectivo S&P 500 ganó un 0,15 % y el Dow Jones de Industriales, el que más tardó en convencerse de que hoy podía ser un día con final feliz, terminó con un leve 0,02 % de ganancias.