Bruselas, 3 jun (.).- Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) adoptaron este jueves unas conclusiones en las que destacan la importancia del transporte ferroviario en la transición hacia una economía verde y animaron a sustituir los vuelos de corta duración por trayectos en tren.
"La necesidad tanto de luchar por una movilidad climáticamente neutra y respetuosa con el medio ambiente como de garantizar un sistema de transporte resiliente e interconectado, especialmente en tiempos de crisis, como se ha demostrado durante la pandemia de la COVID-19, coloca a los ferrocarriles en una posición clave dentro de la futura oferta de transporte", indicaron los países en sus conclusiones.
Los ministros de Transporte de los Veintisiete las adoptaron durante la reunión celebrada hoy de manera presencial en Luxemburgo.
Los políticos aseguraron que el tren es responsable solo del 0,4 % de las emisiones de CO2 generadas por el transporte, pese a representar el 8 % del transporte de pasajeros y el 19 % del de mercancías en Europa.
Añadieron que por ese motivo un traspaso desde los medios de transporte que generan mayores emisiones de carbono al tren "es probablemente el modo más eficaz de descarbonizar el transporte en grandes partes del territorio de la Unión".
Además, los ministros alentaron las iniciativas que tienen como objetivo "ofrecer conexiones ferroviarias que pueden sustituir vuelos de corta distancia, cuando sea posible".
Reconocieron que la pandemia del coronavirus ha provocado "importantes pérdidas económicas para las empresas ferroviarias y los administradores de infraestructuras y ha tenido su impacto más severo en el transporte ferroviario de pasajeros, donde ha podido haber retrasado o bloqueado proyectos para nuevas inversiones y servicios".
Agregaron que la crisis ha expuesto "la necesidad de fortalecer las medidas de resiliencia y contingencia y de mejorar la disponibilidad, coherencia y coordinación en la red ferroviaria y dar mayor prioridad a la mejora de los vínculos transfronterizos como parte de una red ferroviaria transeuropea que constituiría la columna vertebral de rutas de movilidad resilientes y sostenibles".
Igualmente, invitaron a la Comisión a resumir los avances logrados en la preparación de un plan de contingencia en el ámbito de los transportes para abordar mejor la pandemia y otras crisis.
Celebraron que los Estados miembros planeen usar recursos del fondo de recuperación para "mejorar la competitividad del sector ferroviario y apoyar inversiones relacionadas con infraestructuras ferroviarias".
Plantearon también a la Comisión estudiar "posibles planes europeos para ayudar a los operadores ferroviarios de forma no discriminatoria".
Destacaron que una mayor armonización técnica con vistas a una mayor interoperabilidad de las redes nacionales "respaldará el mercado único de los servicios ferroviarios internacionales, los sistemas ferroviarios de la Unión y la eficiencia".
"En el contexto del Pacto Verde Europeo, de la Estrategia de Movilidad Sostenible e Inteligente y, por supuesto, del Año Europeo del Ferrocarril, este es un momento idóneo para que el Consejo haga balance de las acciones de fomento del ferrocarril y realice una declaración política ambiciosa sobre la materia", declaró el ministro portugués de Infraestructuras y Vivienda, Pedro Nuno Santos, cuyo país ocupa la presidencia rotatoria del Consejo.
Recalcó que poner el ferrocarril "en vanguardia" ha sido "uno de los objetivos de la presidencia portuguesa".
"Para mí es muy importante que, cuando hablemos del ferrocarril en un contexto político, veamos el valor que tiene para una movilidad más ecológica, así como su contribución a la cohesión social y territorial, y a la industrialización y el desarrollo económico", sentenció.
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