Los rendimientos del Tesoro estadounidense experimentaron hoy un ligero descenso, con la rentabilidad a 10 años cayendo al 4,44% desde el 4,47%, a medida que aumentaba la confianza de los inversores ante los signos de enfriamiento de la inflación y la resistencia de la economía. Este optimismo está sentando las bases para el S&P 500, que va camino de registrar su mejor mes del año.
La atención del mercado se centra ahora en los principales indicadores económicos que se publicarán esta semana, fundamentales para evaluar la inflación y la salud general de la economía. El jueves se publicarán el índice de precios de los gastos de consumo personal y las ventas de viviendas nuevas. Estos informes son importantes, ya que proporcionarán más información sobre el enfoque de la Reserva Federal con respecto a los tipos de interés.
En la última reunión del año de la Reserva Federal, los participantes en el mercado están deseosos de comprender los posibles cambios en la política monetaria. Aunque se espera una pausa en las subidas de tipos, sigue existiendo incertidumbre en torno a la posibilidad de recortes. Los comentarios de los funcionarios del banco central, incluido el presidente Powell, son muy esperados después de que las últimas actas no indicaran ningún debate sobre una inminente bajada de tipos.
Para completar el calendario económico, el martes se publicará el índice de confianza del consumidor de The Conference Board, y los economistas pronostican otra lectura fuerte a la luz de los constantes resultados económicos. Además, mientras la OPEP aborda la cuestión de la escasez de suministros de petróleo en medio de modestas reducciones de precios, se seguirán de cerca las cifras de inflación de octubre de la Reserva Federal, que se espera muestren una continuación de la tendencia a la relajación iniciada a mediados de este año.
Mientras que los mercados estadounidenses muestran un sentimiento positivo, los mercados asiáticos y europeos han experimentado caídas, reflejo de unas perspectivas económicas mundiales dispares. Es probable que los inversores permanezcan atentos a las próximas publicaciones de datos económicos para calibrar la dirección de los mercados mundiales y el posible impacto en las futuras estrategias de tipos de la Reserva Federal.
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