Barcelona, 27 nov (.).- Los sindicatos de CaixaBank (MC:CABK) temen que el banco presente un ERE para llevar a cabo el ajuste de oficinas y de personal anunciado hasta 2021, y avisan de que no aceptarán salidas forzosas de personal.
CaixaBank ha presentado hoy en Londres su plan estratégico hasta el año 2021, que prevé el cierre de unas 821 oficinas urbanas, un 18 % de la red actual, y ha dado por supuesto que habrá un ajuste de plantilla, aunque no ha precisado por ahora su alcance.
Los sindicatos, que mañana celebran elecciones en la entidad, han dejado claro que solo contemplan salidas voluntarias.
Fuentes sindicales han asegurado que en esas 821 oficinas pueden trabajar actualmente más de 3.000 personas, por lo que asumen que CaixaBank acabará presentando un ERE, aunque desconocen a cuántos empleados podría afectar ese posible expediente de regulación de empleo.
Las salidas voluntarias de personal pactadas en los últimos años han hecho que la franja de personal de CaixaBank en edad de 'prejubilarse' haya descendido notablemente, y eso es un motivo de preocupación entre los sindicatos ante el ajuste de personal que se avecina. "No tenemos tanta gente de 58 años o más", apuntan.
"Una condición sine qua non si hay un ajuste de personal será que no haya salidas forzosas y que se evite la movilidad demográfica", ha explicado a Efe un representante sindical, que ha recordado que actualmente ya hay en marcha un plan de salidas voluntarias para personas nacidas en 1961.
La plantilla de CaixaBank está formada por unas 32.000 personas, incluyendo tanto la red de oficinas como los servicios centrales, y el primer sindicato de la entidad es el SECB, seguido a poca distancia de CCOO, mientras que UGT es el tercero.