Teruel, 15 nov (.).- El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha propuesto la creación de una empresa pública de producción de energía como alternativa para los lugares que, como Andorra (Teruel), con el desmantelamiento de la central térmica, se están quedado "desiertos".
Álvarez participa esta tarde en la mesa ‘¿Cómo podemos redinamizar social y económicamente los municipios rurales?’ dentro de la jornada que se celebra en Teruel de la iniciativa ‘Diálogo sobre el Futuro de la España Despoblada’ para abordar los desafíos de la demografía en el país, pero ha adelantado en rueda de prensa algunas de las premisas que presentará.
Así, ha defendido la importancia de dignificar el campo y tomar partido en el sector energético para frenar la sangría demográfica de la autodenominada España Vaciada y fijar población en los territorios, atendiendo a las peculiaridades de cada uno de ellos.
El secretario general de UGT ha subrayado que en el problema de la despoblación “no es igual” en un municipio que se encuentra a 500 kilómetros de un núcleo importante de habitantes que aquellos que se encuentran a 50 o 100 kilómetros y ha considerado que tampoco afecta de la misma manera a las localidades que hace años que perdieron gran parte de su población de aquellas otras que comienzan ahora su declive.
En este sentido, Álvarez ha puesto como ejemplo la localidad turolense de Andorra, que, tras el cierre de la central térmica, y una vez que terminen los trabajos de desmantelamiento, corre el peligro de quedarse sin una gran fuente de oportunidades laborales y que eso signifique un importante éxodo de población.
Ante ello, el secretario general de UGT ha considerado necesaria la intervención del Estado para la puesta en marcha de medidas de reindustrialización en aquellos lugares en los que haya desaparecido la actividad industrial, con planes y proyectos concretos, y una participación mayor en el sector energético.
“Creo que el Estado necesita una empresa pública de energía. Sería una alterativa para los lugares que se están quedando desiertos en la producción”, ha indicado.
Ha añadido que la formación es otro de los elementos claves para tener mano de obra cualificada en el territorio.
Igualmente, Álvarez ha estimado oportuno abordar el trabajo del campo, aprovechando la reforma laboral que en estos momentos se está llevando a cabo, con un convenio con carácter estatal “que vertebre, que dignifique con jornadas laborales dignas y con trabajadores asentados en el territorio”.
Así, ha apostado por implantar el fijo discontinuo en el campo, para que los trabajadores puedan atender las diferentes actividades agrícolas del territorio en las diferentes etapas del año y se permita asentar población.