Madrid, 20 oct (.).- La ministra de Industria, Reyes Maroto, ha indicado que todas las políticas que está desarrollando el Gobierno, incluida la energética, están ayudando a la industria, frente a lo que hizo el PP cuando subió el precio de la electricidad, que elevó los impuestos y creó nuevas figuras impositivas para gravar la energía.
Maroto, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, ha recordado este miércoles a la diputada del PP Tristana Moraleja que el actual Ejecutivo para aliviar a los consumidores la subida del precio de la luz ha reducido el IVA del 21 % al 10 %, ha suspendido el impuesto al valor de la producción eléctrica y prácticamente eliminado el Impuesto Especial a la Electricidad.
También ha señalado que se ha dado nuevos ingresos a la industria electrointensiva para compensar los costes que tiene por el CO2, cuyos derechos de emisiones también se han disparado en el mercado.
La ministra ha recriminado al PP, que hoy ha denunciado las paradas de actividad y cierres de industrias que se están produciendo por los altos precios de la electricidad, que votara el otro día en el Congreso en contra de medidas para abaratar la factura de la luz, algo que de haber salido adelante hubiera condenado a la industria a no poder contener los precios de la energía.
Reyes Maroto ha dicho que "el PP no nos puede dar lecciones", pues cuando desde el Gobierno tuvo que afrontar la subida del precio de la energía que se produjo entonces, subió el IVA de la luz del 18 % al 21 %, pero "no les bastó", sino que "crearon nuevas figuras tributarias", como el Impuesto al Valor de la Producción Eléctrica, el canon hidráulico y el conocido como Impuesto al Sol.
Además, ha acusado al PP de dejar a los españoles "una herencia insoportable", los 10.000 millones de euros de los laudos arbitrales que se generaron por "el decretazo que hizo contra las renovables".
Maroto les ha dicho a los populares que si están preocupados por la industria, apoyen los Presupuestos Generales del Estado para 2022, que van a contar con la mayor partida presupuestaria que ha habido para la política industrial española, más de 4.831 millones de euros.