Granada, 18 mar (.).- La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha pedido este viernes el cese del "boicot" a los huelguistas del transporte, les ha reclamado que se sienten a negociar en las mesas de diálogo y ha asegurado que en estos momentos el suministro está garantizado y no hay que temer problemas de abastecimiento.
Maroto, que ha participado en un encuentro empresarial en Granada, ha trasladado la "preocupación" del Gobierno por esta huelga promovida por un grupo "minoritario" de empresas cuya convocatoria es tan legítima, ha dicho, como la defensa del interés general que va a propiciar el Gobierno, en lo que va a ser además "muy contundente".
Aunque ha admitido que la huelga está afectando no solo al sector de la distribución, sino también "a la parte más débil de la cadena agroalimentaria", en alusión a los ganaderos, agricultores y pescadores, ha señalado que en estos momentos el suministro está garantizado y no hay que "temer" por problemas de abastecimiento.
La ministra ha pedido el cese del "boicot" porque está dificultando "el día a día de muchas familias que necesitan trabajar" y ha llamado a los convocantes a que se sienten a negociar junto con el resto de sectores en las mesas de diálogo abiertas para buscar una solución a sus reivindicaciones.
Ha recordado que este jueves se aprobó un real decreto ley en el Congreso que ya incorpora muchas de las medidas que reivindica el sector de los transportes, al que ha pedido que piense en aquellos a los que está perjudicando el boicot, que no son solo, ha dicho, los consumidores.
"Acabamos de presentar un importante paquete de ayudas al sector del transporte que era muy necesario y que da también mucha certidumbre a la hora de que sus reivindicaciones se puedan poner en marcha", ha añadido.
Maroto, que ha incidido en que el Gobierno no cesará en defender el interés general, ha indicado que es difícil cuantificar el impacto que está teniendo la huelga porque está siendo "muy asimétrica en función de los territorios", aunque sus objetivos van dirigidos a frenar, ha precisado, el suministro de bienes esenciales.