Río de Janeiro, 8 feb (.).- Un total de 5.533 empleados del Banco do Brasil (SA:BBAS3), el 5,2 % de la plantilla, manifestó su interés de acogerse a los planes de bajas voluntarias ofrecidos en enero por la mayor entidad financiera del país, según informó este lunes en un comunicado al mercado.
El banco, controlado por el Estado pero con acciones negociadas en la Bolsa de Sao Paulo, informó que anunciará el impacto que esas renuncias voluntarias tendrá en sus finanzas el próximo jueves, cuando difundirá sus resultados financieros y operativos en 2020.
Los planes de bajas voluntarias fueron anunciados el 11 de enero pasado en el marco de un amplio programa de reestructuración con el que el Banco do Brasil pretende cerrar 361 oficinas, incluyendo 112 agencias bancarias.
La entidad anunció entonces dos nuevos planes de incentivo a las bajas voluntarias, uno para optimizar la distribución de la fuerza de trabajo y otro para anticipar la salida de los empleados que están próximos a la jubilación.
El banco esperaba que unos 5.000 empleados se acogieran a los dos planes hasta el 5 de febrero, cuando vencía la fecha inicial para manifestar interés en los programas.
Del total de empleados que manifestó interés en acogerse a los planes de renuncia voluntaria, un 74 % lo hizo gracias a que ya tiene la edad de jubilación y otro 5 % porque tan sólo le faltan tres años para jubilarse.
En julio de 2019, el Banco do Brasil ya había anunciado un primer plan de incentivo a las renuncias voluntarias para promover una adecuación en la distribución de los empleados y reducir excesos en algunas dependencias y ciudades.
Según el balance financiero que divulgó en noviembre, hasta septiembre de 2020 el banco contaba con 92.106 empleados, una reducción del 1,9 % frente a los que tenía en el mismo mes de 2019 (93.872).
Mediante su plan de reestructuración de su red de agencias el Banco do Brasil planea alcanzar un ahorro de 2.700 millones de reales (unos 500 millones de dólares) hasta 2025.