Vitoria, 17 jun (.).- La dirección de Mercedes ha suspendido las negociaciones con el comité del convenio colectivo hasta que concluyan las jornadas de huelga convocadas en la planta de Vitoria, una decisión que ha comunicado este viernes a los representantes sindicales en la reunión que han mantenido ambas partes.
Así lo han confirmado a Efe varios de los sindicatos representados en el comité, que han explicado que en esta reunión no ha habido avances en torno al convenio ya que la postura de la dirección no ha variado, sobre todo en torno a la flexibilidad.
El presidente de comité, Igor Guevara (ELA), ha lamentado la decisión de la dirección de paralizar las conversaciones ya que, en su opinión, la solución al conflicto únicamente se puede resolver hablando y dialogando.
Los sindicatos, que tenían esperanza de que en la reunión de este viernes pudiera haber algún avance, mantienen por tanto las jornadas de huelga, la primera el próximo 22, día en el que hay dos convocatorias de paro de 24 horas, una organizada por ELA, LAB y ESK y otra por UGT y CCOO.
Además, UGT y CCOO tienen formalizada otra convocatoria de huelga para el 29 de junio y ELA, LAB y ESK otros días de paros entre el 27 de junio y el 1 de julio.
Ante esta división, representantes sindicales de ambos bloques han reconocido la importancia de secundar de forma unitaria las huelgas pese a las discrepancias que mantienen sobre el convenio, aunque de momento la única convocatoria en la que coincidirán en las protestas es la que tendrá lugar el próximo miércoles.
Las principales reivindicaciones sindicales en la negociación colectiva pasan por mantener el poder adquisitivo, no ampliar la flexibilidad, un contrato relevo mejorado, que las nuevas incorporaciones no tengan peores condiciones laborales y regular las de quienes trabajan el fin de semana.
El malestar sindical en Mercedes se ha intensificado en los últimos días por la presión que aseguran tener por parte del Gobierno Vasco y de la Diputación de Álava, que han hecho llamamientos para lograr un acuerdo en torno al convenio después de que la dirección de la multinacional anunciara la posibilidad de hacer una inversión en la planta de Vitoria de 1.200 millones de euros.