Praga, 3 abr (EFE).- La canciller alemana Ángela Merkel abogó hoy en Praga por dar prioridad para trabajar en Alemania a los españoles desempleados frente a los inmigrantes de fuera de la Unión Europea.
"Si vemos que hace falta gente en Alemania, y en España hay un 40 % de jóvenes sin trabajo, no vamos a traer inmigrantes de fuera", dijo la mandataria en un debate público con su homólogo checo, Petr Necas, en la Facultad de Derecho de la Universidad Carolina.
Esto responde, según la dirigente democristiana, a una de las exigencias fundamentales de la UE, que promueve desde su fundación la creación de un mercado interno de mano de obra, servicios y capitales.
Sin embargo, tanto Merkel como Necas reconocieron el largo camino que aún queda por recorrer.
Merkel hizo asimismo balance del proceso de integración comunitaria, tras un lustro en el que se desencadenó la crisis financiera y económica.
"La crisis ha mostrado que no funcionan algunas política comunitarias como deberían", según la dirigente conservadora, y entre ellas mencionó todas aquellas medidas ligadas a la competitividad.
"Hay que mejorar la competitividad comunitaria", reiteró Merkel, en un mundo globalizado donde la UE cada vez tiene menos peso, ya que sólo genera el 20 % de la renta mundial y ostenta el 8 % de la población.
La crisis también ha puesto de manifiesto "que las obligaciones (títulos financieros) de los países europeos no son veraces. Si se ganan las elecciones a base de prometer cosas, esos trae endeudamiento", por lo que la alemana abogó una vez más por homologar "las finanzas nacionales".
Ambos líderes reconocieron como una asignatura pendiente en la efectividad de los fondos de cohesión, orientados a mejorar la competitividad de zonas más deprimidas, y "de los que se han beneficiado sobre todos países como Grecia, Portugal e Irlanda", indicó Necas.
"En la crisis se vio que la dotaciones de estos fondos no se hizo bien. Hay que lograr que los beneficiarios se coloquen entre los más competitivos de la UE", corroboró Merkel.
Merkel afirmó que estoy en contra de los eurobonos comunitarios, porque no tememos los países miembros el mismo tipo de interés, que es reflejo de la competitividad. El eurobono comunitario será el resultado de una empresa política común", apostilló. EFE