Nueva York, 25 oct (EFE).- Microsoft (NASDAQ:MSFT) anunció este martes unas ganancias de 17.556 millones de dólares en el primer trimestre de su ejercicio 2023 -que no sigue el calendario natural-, un 14 % menos respecto al mismo periodo del año pasado, lastrado por unos mayores costes.
En un comunicado, la tecnológica dirigida por Satya Nadella indicó que sus ingresos del trimestre comprendido entre julio y septiembre, en cambio, aumentaron casi un 11 %, hasta los 50.122 millones de dólares, con un crecimiento continuado de su negocio en la nube, Cloud.
"En un mundo que afronta cada vez más factores adversos, la tecnología digital supone el mayor empuje", dijo Nadella en la nota, en la que afirmó que la empresa está invirtiendo en sus áreas de crecimiento y gestionando con disciplina su estructura de costes.
La responsable financiera de la compañía, Amy Hood, desgranó que Microsoft Cloud en conjunto supuso más de la mitad de los ingresos del trimestre, 25.700 millones, y que goza de una sólida demanda.
El desglose de los resultados indicó que la nube inteligente es el segmento de mayores ingresos, 20.300 millones de dólares (un 20 % más) con gran impulso de la plataforma Azure, que creció un 35 % interanual.
El segmento de productividad y procesos de negocio ingresó 16.500 millones de dólares (un 9 % más), sobre todo gracias a las ventas del paquete de ofimática Office 365 Commercial, la plataforma inteligente Dynamics 365 y la red social LinkedIn.
El segmento de computación personal, que ingresó 13.300 millones de dólares, fue el único que decreció ligeramente principalmente a causa de las licencias de su sistema operativo que incluyen otros fabricantes en sus ordenadores, y que recaudaron un 15 % menos.
Durante el trimestre, los costes de producción aumentaron un 13 %, hasta 15.452 millones de dólares, y hubo mayores gastos de investigación y desarrollo, ventas y márketing y cuestiones generales y administrativas respecto al ejercicio anterior.
Asimismo, se redujo un 11 % la partida destinada a la recompra de acciones y el pago de dividendos, que supuso 9.700 millones de dólares.
Los resultados, publicados al cierre de la bolsa, fueron más flojos de lo esperado por los analistas de Wall Street y las acciones de la compañía bajaban un 1,9 % en las operaciones electrónicas del mercado.