Alicante, 25 abr (.).- La Inteligencia Artificial (IA) debe erigirse en un "copiloto" para ayudar a adoptar "las mejores decisiones y no tanto para suplantarlas", según el presidente de Microsoft (NASDAQ:MSFT) España, Alberto Granados.
En la jornada Opendir 'Escenarios Duales en la Empresa. El Reto del Equilibrio', organizada por el Círculo de Directivos de Alicante, Granados ha tratado el desafío de las nuevas tecnologías ante un auditorio de unos 1.200 gestores empresariales, donde ha defendido una Inteligencia Artificial "humanista" en el sentido de que no reemplaza algunas de las facetas en las que la persona es insustituible.
Ha trasladado que las empresas suelen tener tres tipos de tareas: las automatizadas por medio de las tecnologías; las que "jamás delegarías" en un programa informático, como una conversación con un cliente o la relación médico-paciente; y un tercer grupo que denomina 'Centauro' porque la IA ayuda a aumentar los resultados con este referido papel de "copiloto".
En los sectores de la banca y los seguros, por ejemplo, ha manifestado que la IA debe ser utilizada en aplicaciones que aconsejen al empleado sobre qué se puede plantear al cliente, sugerir posibilidades o advertir sobre formas de atender al usuario.
"Esta es la grandeza de la Inteligencia Artificial", según el presidente de Microsoft España, quien ha sostenido que este uso "no sólo no destruye empleo sino que lo crea" porque "aumenta la captación de clientes y mejora los resultados".
"Sirve para dar ideas y aumentar el punto de creatividad" mediante la conexión de datos que, en un principio, pueden parecer "absolutamente inconexos" pero que pueden ayudar a nuevos productos, ha comentado Granados.
Sí que ha admitido que uno de los mayores retos a los que se enfrentan las empresas tecnológicas es afrontar y evitar "la Inteligencia Artificial mal usada".
El presidente de Microsoft España ha intervenido en Opendir en un diálogo con el presidente del Grupo Cajamar, Francisco Baamonde, quien ha sostenido que "la Inteligencia Artificial nunca determinará un crédito" a un cliente porque esa decisión corresponde a las personas que trabajan en la entidad bancaria.
"En Cajamar vemos la IA como una oportunidad pero depende de cómo se gobierne", ha apuntado Baamonde, quien ha explicado que la entidad trabaja en establecer sus propios límites en el uso.
Ha continuado que Cajamar, como grupo cooperativo, no se convertirá en una entidad exclusivamente digital porque tienen en su ADN que "el contacto físico y humano seguirá siendo necesario".
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