Sao Paulo, 3 abr (EFE).- La agencia de calificación de riesgo Moody's afirmó hoy que mantendrá la perspectiva estable de la nota de crédito soberana de Brasil este año, aunque advirtió que una posible revisión dependerá de la política económica que emprenda el Gobierno que salga de las urnas en octubre próximo.
El analista de crédito soberano de Moody's, Mauro Leos, dijo en una rueda de prensa en Sao Paulo que, a pesar de que las perspectivas macroeconómicas de Brasil para 2014 son "conservadoras", la agencia de calificación no prevé revisar este año la nota "Baa2", con perspectiva estable, que le otorgó al país en octubre pasado.
El anuncio fue hecho una semana después de que la agencia de calificación de riesgo Standard & Poor's rebajara la nota soberana de crédito de Brasil desde "BBB" hasta "BBB-", por lo que el país quedó en el último escalón de los países con grado de inversión, es decir considerados seguros para la inversión.
"Los números (macroeconómicos) son débiles, pero no esperamos sorpresas ni positivas, ni negativas. Por eso vamos a esperar este año para ver el programa de la próxima administración", comentó Leos al ser interrogado sobre si Moody's también revisaría su evaluación.
El especialista recordó que desde hace varios años el gigante latinoamericano convive con un crecimiento "débil" situado en el 2 % anual, una inflación "elevada" en torno al 6 % al año y unos datos fiscales buenos, pero "no lo suficientemente fuertes".
A pesar de este pesimista escenario, Leos aclaró que la nota de crédito soberana también es fijada teniendo en cuenta los riesgos del país y sus respectivos Gobiernos en comparación con otros países.
"En Brasil los riesgos no son tan altos como los que hemos visto en otros países, y es por eso que todavía mantenemos la perspectiva estable", precisó el analista, quien destacó la buena salud de las cuentas externas, en relación con otras, y el "buen" nivel de reservas del país suramericano.
Respecto a las proyecciones para 2015, Leos afirmó que los datos macroeconómicos, en principio, no muestran grandes diferencias respecto a los de 2014, aunque precisó que la agencia esperará a ver qué medidas adopta el próximo Gobierno para analizar si revisa o no la perspectiva o la nota de crédito soberano del país.
Brasil celebrará elecciones generales el próximo 5 de octubre y según las últimas encuestas la actual presidenta, Dilma Rousseff, ganará los comicios sin necesidad de disputar una segunda vuelta.
"Los números son importantes, pero más importante todavía son las políticas y prioridades económicas del próximo Gobierno", apuntó.
En ese sentido, explicó que la prioridad son los ajustes fiscales.
Para Leos, en el hipotético caso de que el crecimiento fuera del 1 % en 2015, frente al 2 % que espera para 2014, la cifra no representaría un escenario tan negativo para Moody's si el crecimiento es frenado por los ajustes fiscales del Gobierno.
"En este contexto, aunque el número parezca malo, las razones son buenas. De ahí, la importancia de las políticas", insistió.
Standard & Poor's justificó su decisión de rebajar la nota de la deuda brasileña por lo que describió como una combinación de deterioro fiscal, la posibilidad de que la política fiscal se mantenga débil en medio al crecimiento moderado en los próximos años, una capacidad limitada para ajustar esa política antes de las elecciones y el debilitamiento de las cuentas externas.