Madrid, 18 mar (.).- La agencia de medición de riesgo Moody's ha mejorado la perspectiva del grupo automovilístico japonés Toyota Motor (T:7203) de negativa a estable, a la vez que mantiene su calificación de la deuda a largo plazo en A1, equivalente a un notable alto.
Según ha informado este jueves Moody's, esta mejora en la calificación el mayor fabricante nipón del sector de la automoción viene tras apreciar una recuperación en el número de vehículos vendidos tras dejar atrás los peores meses de la pandemia, y por la previsión de que Toyota Motor mantenga un margen ebitda de entre el 8 y el 9 % durante el próximo año.
La agencia de calificación asegura que la nota de Toyota, la más alta entre los fabricantes de automóviles internacionales, refleja su resiliencia operativa durante la pandemia con unos márgenes superiores a los de sus competidores.
En este sentido, Moody's recuerda que la empresa japonesa se vio obligada a reducir costes durante la pandemia, pero espera que cuando empiece a recuperar los niveles de ventas de automóviles habituales el crecimiento de los ingresos pueda compensar estos costes.
Sin embargo, también advierte que si se mantienen en el tiempo los problemas relacionados con la cadena de suministro que ha sufrido Toyota en los últimos meses, se podría retrasar esta recuperación.
Así, la agencia no espera mejorar la calificación en los próximos 18 meses, ya que considera que el mercado automovilístico aún está recuperándose y tendrá que afrontar los retos que presenta la nueva movilidad eléctrica.
Toyota Motor redujo un 14,1 % su beneficio neto durante los primeros nueve meses de su año fiscal (entre abril y diciembre de 2020) hasta 1,47 billones de yenes (11.590 millones de euros), como consecuencia de la pandemia y a pesar de aumentar la venta de vehículos en el último trimestre del año.