Tokio, 16 mar (EFE).- La agencia Moody's Investors Service rebajó la calificación de emisiones a largo plazo de la primera correduría de Japón, Nomura Holdings, desde Baa2 a Baa3, un escalón por encima del bono basura, detalló hoy el diario Nikkei.
Según Moody's, la rebaja a Baa3, o aprobado bajo, con perspectiva estable de Nomura se produjo por la preocupación que generan las operaciones internacionales de la firma, en un momento crucial para la empresa, afectada por la inestabilidad de los mercados y la crisis de deuda en la eurozona.
Según Moody's, las actividades internacionales de Nomura Holdings han generado un "alto nivel de volatilidad" en sus beneficios debido a "una relativamente débil posición estratégica" de sus negocios, que ha sufrido un entorno complejo.
Además, la agencia rebajó también la calificación a largo plazo de Nomura Securities, principal casa de valores de la compañía, que pasó a Baa2, o aprobado, desde el inicial Baa1.
Por su parte el director de operaciones de Nomura, Takumi Shibata, afirmó hoy que a pesar de la rebaja en la calificación, el grupo tiene solidez en efectivo por valor de 70.000 millones de dólares, detalló Nikkei.
Al margen de la nota de Moody's, el grupo cuenta con la calificación de BBB+, o aprobado alto, con perspectiva estable de las agencias Standard & Poors y Fitch.
La nueva calificación de Moody's supone una revisión de las perspectivas negativas que anunció en agosto, cuando decidió rebajar la calificación de emisiones a largo plazo de los principales bancos nipones.
La agencia recortó entonces la calificación de entidades como el Banco de Tokyo-Mitsubishi UFJ, primer banco del país, desde la "Aa2" a la "Aa3", el Sumitomo Mitsui Banking de "Aa2" a "Aa3", y las dos unidades de negocio del Banco Mizuho desde la "Aa3" a "A1", informó el diario económico Nikkei.
Además de los principales bancos, Moody's rebajó también la calificación de la deuda soberana de Japón, que pasó de "Aa2" a "Aa3", por el déficit presupuestario, la acumulación de deuda pública desde 2009 y los efectos del terremoto del 11 de marzo y la posterior crisis nuclear. EFE