Berlín, 24 ene (EFE).- La agencia de calificación de riesgo Moody's rebajó hoy un escalón la nota crediticia del consorcio alemán ThyssenKrupp, hasta Ba1 (calidad cuestionable), ante una previsible caída de los beneficios en 2013.
Moody's explicó en un comunicado que además ha colocado en "perspectiva negativa" a la empresa, con un amplio abanico de negocios desde la metalurgia al armamento, ante las "desafiantes condiciones de mercado" que van a experimentar la mayoría de negocios de ThyssenKrupp por la crisis europea, así como por sus planes de venta de filiales.
La agencia estadounidense teme que el plan para vender la filial acerera del continente americano, Steel Americas, termine concretándose por un precio menor a su valor contable, de 3.900 millones de euros.
Por ello, "los ratios de deuda de ThyssenKrupp a final del año fiscal 2013 (que concluye en septiembre) serán mayores de lo que es apropiado" para que el consorcio alemán mantenga el "grado de inversión", agrega Moody's en su informe.
Además, la agencia de calificación de riesgo advirtió sobre la pérdida de valor de las acciones de la empresa durante el año pasado y previó una tendencia bajista similar en este ejercicio.
Moody's, no obstante, aplaude "los beneficios" del "programa de optimización de cartera" que está llevando a cabo la compañía y su intención de concentrarse en los negocios de mayor rentabilidad.
Esto, junto con otros planes de ThyssenKrupp para aumentar la "productividad", la "eficiencia" y la "transparencia", lleva a la agencia a predecir el final de un "largo período de pérdidas" para el gigante alemán, "aunque eso no tendrá lugar en 2013".
La perspectiva negativa otorgada subraya, según Moody's, las dificultades que afrontará la empresa en los próximos doce meses a consecuencia de la crisis en Europa y el estancamiento del sector automovilístico en el viejo continente.
Moody's advirtió que ThyssenKrupp podría sufrir nuevas rebajas de su calificación si las condiciones de mercado empeoran, si la venta de Steel Americas no ayuda a reducir la deuda de la compañía, o sí aumenta su apalancamiento. EFE