Helsinki, 30 abr (.).- La compañía finlandesa de telecomunicaciones Nokia (HE:NOKIA) obtuvo una pérdida neta atribuida de 117 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un descenso del 74 % respecto a los números rojos registrados el mismo periodo del año anterior, informó hoy la empresa.
El beneficio bruto de Nokia entre enero y marzo ascendió a 1.778 millones de euros, un 12,5 % más en términos interanuales, mientras que su pérdida operativa se redujo un 85,5 %, hasta los 76 millones de euros.
Los resultados financieros del grupo se vieron lastrados una vez más por las partidas extraordinarias, sin las cuales la compañía registró una ganancia operativa de 116 millones de euros, frente a los 59 millones de pérdidas del primer trimestre de 2019.
Según explicó Nokia en un comunicado, esta mejora de la rentabilidad se debió sobre todo a la reducción de costes lograda con su programa de ahorro, que permitió al grupo mejorar 4,8 puntos su margen bruto de ganancia, hasta el 36,2 %, pese a reducir sus ventas.
La compañía tecnológica finlandesa, uno de los mayores fabricantes mundiales de equipos de telecomunicaciones, facturó 4.913 millones de euros entre enero y marzo, un 2,3 % menos interanual.
La facturación se redujo en todas las regiones geográficas excepto en Oriente Medio y África y en el importante mercado norteamericano, donde creció un 3 %, hasta los 1.462 millones de euros.
En cambio, mantuvo su constante declive en China, donde las ventas se redujeron un 29 %, hasta los 308 millones de euros, debido al aumento de la competencia con la compañía local Huawei y a un "enfoque prudente a la hora de cerrar acuerdos", según explicó Nokia.
Nokia Networks, el negocio de redes de telecomunicación, facturó 3.757 millones de euros, un 4,8 % menos que en el primer trimestre de 2019, con caídas en todos sus segmentos.
Pese a ello, el aumento de sus márgenes de ganancia le permitió reducir un 68 % su pérdida operativa, hasta los 81 millones de euros.
Nokia Software, la nueva división que aglutina los negocios más esenciales del grupo tras la reciente reestructuración, facturó 613 millones de euros, un 13 % más interanual, y aportó un beneficio operativo de 70 millones de euros, frente a los 7 millones de pérdidas del primer trimestre de 2019.
Por su parte, Nokia Technologies, responsable de gestionar su cartera de patentes y licencias, redujo sus ingresos un 6 %, hasta 347 millones de euros, y su ganancia operativa disminuyó hasta los 290 millones, un 4 % menos.
Estos ingresos incluyen el uso de su propiedad intelectual por terceros y las regalías procedentes de la venta de los teléfonos móviles de la marca Nokia, fabricados bajo licencia y en exclusiva por la compañía finlandesa HMD Global.
El todavía consejero delegado de Nokia, Rajeev Suri, resaltó en un comunicado la solidez de los resultados de este primer trimestre del año, un periodo marcado por la pandemia de coronavirus.
"Los sólidos resultados trimestrales muestran amplias mejoras en la rentabilidad interanual a medida que empiezan a afianzarse nuestros esfuerzos para transformarnos y reducir los costes productivos", afirmó Suri, quien dejará la compañía el próximo 1 de septiembre tras 25 años trabajando para Nokia.
Según Suri, la pandemia de coronavirus tuvo un impacto negativo en sus resultados financieros de unos 200 millones de euros durante el primer trimestre, asociados sobre todos a problemas de suministros procedentes de China.