Por Caroline Humer y Ransdell Pierson
NUEVA YORK (Reuters) - La farmacéutica estadounidense Pfizer Inc (NYSE:PFE) y el fabricante de Botox, Allergan anunciaron el miércoles que ponían fin a su acuerdo de fusión, en una importante victoria para el presidente de EEUU, Barack Obama, en su lucha por detener las fusiones de empresas para pagar menos impuestos.
El anuncio se produjo tras presentar el lunes el Tesoro de EEUU nuevas normas para evitar dichos acuerdos. La fusión habría permitido a Pfizer, con sede e Nueva York, reducir el pago de impuestos al domiciliarse en Irlanda, donde la fiscalidad es menor.
Pfizer dijo el miércoles que había acordado pagar a Allergan 150 millones de dólares en concepto de reembolso de gastos asociados con el acuerdo.
Si bien estas nuevas normas no nombraban a Pfizer ni a Allergan, una de sus cláusulas estaba dirigida a una característica específica de su fusión; el pasado de Allergan como gran comprador de otras empresas. La muerte del acuerdo entre los grupos farmacéuticos concede a Obama una gran victoria en su último año de gobierno.
En la mañana del martes, Obama calificó la evasión de impuestos mundial como un "problema enorme" e instó al Congreso a tomar medidas para evitar que las empresas estadounidenses evadan impuestos mediante "reversiones" corporativas, que rebajan las facturas de impuestos de las compañías mediante su redomicialización en el extranjero.