París, 5 feb (EFE).- El fabricante automovilístico Renault se ha
comprometido ante el Gobierno francés a seguir fabricando sus
vehículos de gama alta en Francia, en medio de una polémica en las
últimas semanas por la deslocalización a países más baratos de los
modelos pequeños.
Este compromiso sobre la gama alta incluye los coches que en el
horizonte de 2014 vengan a sustituir a los actuales Espace y Laguna,
pero también -y aunque todavía no hay proyectos- los que pudieran
reemplazar el Safrane o el Vel Satis, según un comunicado conjunto
publicado hoy por Renault y el Ministerio francés de Industria.
Es resultado de un encuentro el pasado miércoles del ministro de
Industria, Christian Estrosi, con el director general delegado del
fabricante, Patrick Pelata, que precisó que los coches que vengan en
lugar del Safrane o el Vel Satis se harán "prioritariamente" en
Francia.
Pelata añadió que si el SM5 que se produce actualmente en Corea
del Sur es porque "estaba destinado principalmente al mercado
coreano" y a los de China, Oriente Medio y Rusia.
El director general delegado confirmó que desde 2012 se iniciará
el ensamblaje de la Trafic en la planta francesa de Flins (ubicada
en la región de París), una nueva versión de la furgoneta que se
comercializará a partir de 2013.
También que el constructor estudia qué modelos pueden aumentar la
carga de trabajo de la fábrica francesa de Sandouville,
especializada en la gama alta, y garantizó que se mantendrá el nivel
actual de empleo allí.
Estrosi y Pelata acordaron la puesta en marcha de un comité de
seguimiento sobre el futuro de Sandouville, que estará operativo en
unas semanas con representantes de Renault, de los poderes públicos
y de los interlocutores sociales.
Después de varios días de presión sobre Renault al calor de
filtraciones sobre sus planes para deslocalizar completamente la
producción del Clio a Turquía, el presidente de la empresa, Carlos
Ghosn, tuvo que asegurar al jefe del Estado francés, Nicolas
Sarkozy, que la nueva versión de ese modelo a partir de 2013
continuará ensamblándose en Flins.
El Estado francés es el primer accionista de Renault con un 15%
del capital. EFE