París, 1 jul (EFE).- La economía africana, pese al contexto de crisis global generalizada, creció un 4,2 % el pasado año, y ese ritmo se acelerará al 4,8 % en 2013 y al 5,3 % en 2014, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Los vectores de esa expansión serán la ampliación de la producción agrícola, el "crecimiento sólido" de los servicios y un aumento de la extracción de petróleo y de otros recursos minerales, todo eso respaldado por un mayor consumo y por el avance de las inversiones, destacó hoy la OCDE en su informe anual de "Perspectivas Económicas de África".
Pese a todo, la organización precisó que "este crecimiento no es suficiente para reducir la persistente pobreza, el desempleo y la desigualdad de los ingresos, ni -en algunos países- para frenar el deterioro de los niveles de salud y de educación".
Es decir, que "el progreso sigue siendo lento", las desigualdades de ingresos continúan acentuándose y los indicadores de educación y salud en algunos lugares se deterioran, lo que evidencia que "muchas personas no se están beneficiando del crecimiento económico".
Las tasas más elevadas de incremento del Producto Interior Bruto (PIB), de acuerdo con las proyecciones se darán en la parte occidental del continente, aunque también el África central y oriental conseguirán resultados "sólidos", mientras el sur se verá "perjudicado por la débil recuperación de Sudáfrica".
Por lo que respecta a los países del norte de África, la OCDE reconoció que "la lenta transición a la democracia" puede seguir afectando a sus economías, con la excepción de Libia, que está viviendo una "fuerte recuperación".
A este último respecto, los autores del estudio señalaron que si se hubiera incluido el repunte de Libia tras el derrumbe sufrido por ese país durante la revolución de 2011 que llevó al derrocamiento de Muamar Gadafi, el alza del Producto Interior Bruto (PIB) del conjunto de África habría sido del 6,6 % en 2012.
Uno de los elementos clave en la expansión africana es la de los flujos financieros externos que ha recibido, ya que se cuadruplicaron desde 2001 hasta el pasado ejercicio, cuando alcanzaron un máximo histórico.
Esas inversiones representaron de medio el 4 % del PIB en los Estados africanos de ingresos superiores y medios, y hasta un 18 % en los de bajos ingresos.
De acuerdo con las proyecciones de la OCDE, la inversión extranjera directa se va a mantener firme este año, con una subida superior al 10 %.
Los principales receptores de esos flujos serán países con proyectos de recursos naturales en el sur del continente, como Angola, Mozambique y Sudáfrica.
En cuanto a su procedencia, Europa y Estados Unidos continúan siendo los principales socios comerciales, pero potencias emergentes como China, India y Brasil "están reforzando sus posiciones", señaló el conocido como el "Club de los países desarrollados".
La OCDE hizo hincapié en que la explotación "eficaz y equitativa" de los recursos naturales "puede ser la solución para conjugar crecimiento económico y desarrollo humano" y que "queda mucho potencial que no se ha explotado".
En ese sentido, aconsejó a los países africanos crear las condiciones para transformar esos recursos naturales en empleo, maximizar los ingresos con una política fiscal "eficaz y eficiente" y promover los vínculos económicos entre inversores extranjeros y operadores locales. EFE