Varsovia, 9 jun (.).- La cámara baja del parlamento polaco (Sejm) ha transferido al presidente de Polonia la reforma del sistema judicial para abolir la Sala Disciplinaria del Tribunal Supremo, en lo que supone un paso adelante hacia el desbloqueo de fondos europeos.
El Sejm votó este jueves en contra de la mayor parte de las enmiendas que habían sido propuestas por el Senado -la cámara alta- como parte del proceso legislativo, por lo que ahora le corresponde al presidente polaco, Andrzej Duda, decidir si ratifica la legislación.
La reforma es una de las condiciones impuestas por la Comisión Europea (CE) para que Polonia pueda acceder a su parte de los fondos NextGenerationEU, por valor de 36.000 millones de euros.
El Sejm ya había aprobado el borrador el pasado 26 de mayo, pero la cámara alta del parlamento presentó posteriormente 29 enmiendas, la mayoría de las cuales han sido ahora rechazadas por la coalición conservadora que ostenta la mayoría en la cámara baja.
La reforma fue propuesta por el propio presidente Duda, a modo de compromiso para resolver la larga disputa con la CE sobre el estado de derecho en Polonia.
El principal punto de contienda entre Varsovia y Bruselas es la creación en 2017 de la Sala Disciplinaria del Tribunal Supremo, un órgano con potestad para sancionar a magistrados que según las instituciones europeas restringe la independencia de los jueces polacos.
En julio del año pasado, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dictaminó que Polonia debía suspender la actividad de dicha sala, y a finales de octubre impuso a Varsovia una multa de un millón de euros diarios por no aplicar la sentencia.
La propuesta de Duda abole la Sala Disciplinaria y la reemplaza por un nuevo órgano, la Sala de Responsabilidad Profesional, cuyos miembros son elegidos por otro procedimiento.
La reforma es una de las condiciones bajo las cuales la CE aceptó a principios de junio la propuesta de Polonia para emplear su parte de los fondos NextGenerationEU, 23.900 millones de euros de subvenciones y 11.600 millones en créditos.
No obstante, la nueva propuesta ha sido blanco de críticas por parte de la Oposición, que argumenta que la reforma sencillamente reemplaza la Sala Disciplinaria por un órgano similar y por ello no cumple con los requisitos de la CE.