Berlín, 5 mar (EFE).- Trabajadores de los servicios públicos en los estados federados alemanes de Hesse, Sarre y Renania-Palatinado iniciaron hoy una huelga de advertencia convocados por el sindicato Verdi, que prevé movilizar al sector toda la semana para presionar en sus exigencias para la negociación del convenio colectivo.
La huelga selectiva afecta al transporte público de Fráncfort, la capital financiera de Alemania, donde no funcionan el metro y los tranvías, tampoco trabajan el personal de las guarderías públicas, las enfermeras y los recogedores de basura de esos tres estados.
Verdi tiene intención de movilizar al personal de los servicios públicos de manera selectiva toda la semana, con convocatorias que tendrán lugar alternativamente en los 16 estados federados y en distintos campos del sector.
La huelga se centra en los empleados públicos de Estado y los ayuntamientos en los que trabajan unos dos millones de personas, para los que Verdi exige aumentos salariales del 6,5 % o al menos 200 euros.
Los responsables de la patronal no presentaron la pasada semana oferta alguna y exigieron que el sindicato rebajara sus exigencias para sentarse a negociar en la mesa que se ha constituido en la ciudad de Potsdam, junto a Berlín.
Hasta la próxima reunión concertada para el 12 de marzo Verdi pretende mantener la presión con las huelgas selectivas, que mañana afectarán a los estados federados de Mecklemburgo-Antepomerania y el sur de Baden-Württemberg. EFE