Managua, 13 ago (EFE).- El Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) llamó hoy al Gobierno de Nicaragua a diseñar medidas que permitan incrementar el número de trabajadores que cotizan al Seguro Social mediante la reducción de la informalidad, que afecta a tres cuartas partes del mercado laboral.
El empleo informal en Nicaragua, con bajos salarios, sin acceso al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) y que mantiene a ese segmento bajo el umbral de la pobreza, es del 75,5 %, según datos del Banco Central de este país centroamericano, advirtió el titular del Cosep, José Adán Aguerri, en un comunicado.
"Es necesario incrementar el número de asegurados en el INSS. Al mes de mayo pasado existen aproximadamente 674.000 asegurados que representan únicamente cerca del 20,5% de la Población Económicamente Activa (PEA)", alertó.
El dirigente empresarial sugirió, por ejemplo, hacer un análisis sobre el impacto del sector agrícola en la generación de empleo en Nicaragua y cómo incorporar a los trabajadores del campo al sistema de seguridad social.
Aguerri consideró como "prioritario, desde el punto de vista de políticas públicas", incrementar la base de cotizantes a través de la reducción de la informalidad del mercado laboral, debido a que tres de cada cuatro nicaragüenses trabajan "en establecimientos que no llevan registros contables".
El líder gremial hizo ese planteamiento a propósito de una propuesta de reforma al sistema de seguridad social que presentará el Ejecutivo a empresarios y trabajadores en septiembre próximo.
Al respecto, el presidente del Cosep rechazó la propuesta de algunos sindicatos de elevar únicamente el aporte patronal al INSS del 16 % al 19 % porque, a su juicio, "es contraria al objetivo de reducir la informalidad y generar más empleo formal".
"Una medida unilateral como esta, solo incrementaría los costos de operación de las empresas, lo que se reflejaría en el aumento de los precios de los bienes y servicios, limitaría la formalización del empleo y de nuevas contrataciones, y se convertiría en un incentivo perverso que solo generaría mayor informalidad", anotó.
El Ejecutivo ha descartado aumentar de 60 a 65 años la edad de jubilación y duplicar de 750 a 1.500 las semanas de cotizaciones al INSS, como lo sugirió el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El sindicato sandinista Frente Nacional de los Trabajadores (FNT), afín al Gobierno del presidente Daniel Ortega, ha expresado también su disposición a impulsar una reforma del sistema de seguridad social, sin aumentar la edad de jubilación, ni las semanas de cotizaciones, aunque sí elevando la cuota patronal. EFE