MADRID (Reuters) - Los máximos representantes de la patronal y sindicatos españoles han llegado a un acuerdo para recomendar a empresas y trabajadores que pacten incrementos salariales para lo que queda de 2015 de hasta el 1 por ciento y del 1,5 por ciento para 2016, dijo una fuente de las negociaciones el martes.
El acuerdo salarial, que ayudará a reducir la incertidumbre sobre la futura evolución de los costes laborales para miles de empresas, era el principal escollo para cerrar un nuevo pacto de convenios que sustituirá al alcanzado en 2012 y para el que aún no hay principio de acuerdo.
"Esta tarde habrá una nueva reunión para tratar de cerrar del todo el acuerdo", dijo a Reuters la fuente.
Los agentes sociales llevaban meses negociando la actualización de ese pacto que alcanzaron hace tres años, que aconsejaba incrementos salariales moderados hasta 2014 en medio de una dura crisis económica que el país espera dejar atrás con crecimientos del PIB de un 2,9 por ciento en 2015 y 2016.
La subida salarial media pactada en convenio para el año pasado rozó el 0,6 por ciento, en línea con las recomendaciones de ese II Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) que debe renovarse ahora.
El Gobierno considera que ese acuerdo fue clave para evitar que se perdieran miles de puestos de trabajo en España y para mejorar la competitividad de la economía gracias a la caída de los costes laborales en el país.
A ese pacto se sumó posteriormente la reforma laboral aprobada por el Ejecutivo en 2012, que ofreció un mayor grado de flexibilidad a las empresas para acompasar su organización interna al ciclo económico.
REACCIÓN POSITIVA DEL GOBIERNO
La ministra de Empleo, Fátima Báñez, dijo el martes que el nuevo el acuerdo salarial favorecería la inserción en el mercado laboral de los parados y fortalecía la recuperación y la creación de empleo de calidad.
Por su parte, el responsable de Economía, Luis de Guindos, dijo que las cifras pactadas estaban en línea con lo previsto por el Gobierno en su programa de estabilidad y eran compatibles tanto con la ganancia de poder adquisitivo de los trabajadores como con el mantenimiento de la competitividad de las empresas.
El sindicato La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) aprovechó el pacto alcanzado en el ámbito privado para reclamar al Ejecutivo una subida de sueldos también para los empleados de las administraciones públicas, después de seis años consecutivos de congelación salarial.
MENSAJE DE RECUPERACIÓN
Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), responsables del acuerdo con la patronal, defendían inicialmente una subida del 1,5 por ciento, alegando que la mejora del poder adquisitivo de los trabajadores era el mejor mensaje de recuperación al ayudar a impulsar el consumo y el crecimiento, además de ser una cuestión de justicia social.
Para la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), elevar los costes laborales en un momento en el que la recuperación es aún incipiente podría llevar a una pérdida de competitividad y obstaculizar la contratación y ofrecía subidas de hasta un 0,9 por ciento para 2015 y de hasta un 1,3 por ciento para 2016.
Los sindicatos denuncian que la crisis y la reforma laboral han sido utilizadas por los empresarios para rebajar las condiciones laborales y elevar la precariedad de los trabajadores españoles, con muchos de los nuevos empleos de baja cualificación, mal pagados y con poca seguridad.
La tasa de paro en España, la segunda mayor de Europa después de Grecia, se situó al final del primer trimestre en el 23,78 por ciento de la población activa.