Oviedo, 17 dic (.).- Las patronales del transporte ha pedido este viernes unidad de acción al sector para que secunde la huelga convocada del 20 al 22 de diciembre por “dignidad y dinero” porque, según ha asegurado, está en juego su futuro y se ha llegado ya “al límite”.
Así lo han pedido en rueda de prensa el presidente la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) y de la Asociación de Empresarios del Transporte y Aparcamientos de Asturias (ASETRA), Ovidio de la Roza, y de la Central Empresarial de Servicios Nacionales e Internacionales del Transporte (CESINTRA), Alejandro García Monjardín.
La Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) ha convocado el paro en un sector que agrupa en España a los transportistas de 108.007 empresas, de los que 68.624 tienen vehículos pesados y 34.150 ligeros, mientras que en Asturias hay 3.006 transportistas, de los que 2.243 tienen vehículos pesados y 763 vehículos ligeros con una flota de 7.500 vehículos.
Según han expuesto ambos representantes del sector, el hecho de que la huelga fuera convocada ya hace un mes y medio amortigua los efectos de un posible desabastecimiento ya que desde hace 15 días el sector está trabajando “a tope” porque las grandes distribuidoras y los sectores del metal y construcción, entre otros, se están adelantando con su aprovisionamiento.
De la Roza y García Monjardín han apelado a la unidad de acción porque el sector tiene la capacidad de ser fuerte y han pedido que se dejen al margen posibles rencillas porque esta es una única oportunidad para que se respete al sector.
Ambos han criticado los escasos avances en la negociación con el gobierno, especialmente desde la llegada al Ministerio de Transportes de su titular Raquel Sánchez, a la que han acusado de “ningunear” al sector y dejar en papel mojado los compromisos adquiridos por su antecesor, José Luis Ábalos.
Para la patronal, las empresas del sector siguen soportando una fuerte subida de los costes (especialmente de los carburantes), que no pueden repercutir a sus clientes ante la falta de herramientas jurídicas para ello y la "posición de dominio" de quienes les contratan.
Tampoco se han solventado los tiempos de espera "desorbitados" de los transportistas (que además tienen que hacer labores de carga y descarga), la posible imposición de peajes, la desaparición del gasóleo profesional o la falta de devolución de los 200 millones del céntimo sanitario.
La patronal confía en que la reunión que esta misma tarde se va a celebrar permita arrancar algún compromiso que se plasme en un documento oficial, bien a través de su publicación en el BOE o mediante un real decreto.
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