Los recientes problemas de Boeing (NYSE:BA) siguen siendo uno de los principales temas de debate en Wall Street esta semana. Los analistas de mercado de Bernstein han reafirmado una calificación positiva y han fijado un precio objetivo de 272 dólares por acción.
Estos comentarios se producen tras conocerse que la avería del vuelo 1282 de Air Alaska no fue un error de producción aislado.
Los exámenes realizados el lunes pusieron al descubierto que varios aviones de Alaska Airlines y United Airlines tenían pernos sin asegurar en las juntas de las puertas, lo que revela un problema constante de calidad de montaje y fallos de supervisión.
Es probable que este problema recurrente provenga de Spirit AeroSystems (SPR), donde se construyen las carrocerías de los aviones.
Aunque es posible que Boeing no tenga la culpa directa, se espera que aplique inspecciones o supervisión más estrictas en Spirit AeroSystems, según los analistas.
El consejero delegado de Boeing, Calhoun, ha hecho hincapié en la necesidad de mejorar la garantía de calidad, declarando que los aviones MAX-9 reanudarán los vuelos sólo después de recibir su consentimiento y el del equipo directivo.
"A pesar de los recientes titulares, no consideramos que se trate de un problema específico del modelo '737MAX' ni de un defecto en su diseño", afirman los analistas de mercado.
Lo que más les preocupa es la pregunta: "¿Cómo podemos estar seguros de que no hay problemas adicionales sin descubrir?".
"Responder a esto será todo un reto", continuaron.
En consecuencia, los analistas predicen que algunos clientes considerarán la posibilidad de elegir modelos de avión diferentes, porque mantener una flota uniforme es crucial para las grandes aerolíneas.
El martes, las acciones de Boeing bajaron otro 1,4%.
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